
El pasado fin de semana la danza vibró en dos teatros habaneros, exhibiendo funciones de alto vuelo artístico. Mientras en el Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso, Danza Contemporánea despertaba la escena con su paso preciso, en la sala Avellaneda del Teatro Nacional, Acosta Danza mostraba en Mitos, su «nervuda» presencia en las tablas.
El tiempo ha pasado, pero aquellos lejanos «postulados» humanos y estéticos, arraigados en lo más profundo del entonces muy joven danzante, hoy director de Acosta Danza, se van sedimentando con fuerza y tesón, ante cada función de la compañía, en apenas tres años de existencia.
La temporada en el Teatro Nacional, diversa, bien pensada, poniendo a cada bailarín en su dimensión adecuada para que rinda al máximo, es de por sí, un triunfo. El programa presentado, y que en parte viaja ahora por Cuba en la primera gira nacional de Acosta Danza, es una propuesta fresca con cuatro estrenos en Cuba, y la reposición de Imponderable, del español Goyo Montero.
Precisamente, esta pieza fue estrenada luego del paso del huracán Irma y no pudo brillar en todo su esplendor, especialmente en el diseño de luces. Ahora regresó ataviada a su forma, enfocando cuerpos y armando atmósferas, con su sutil iluminación, junto con la música de Owen Belton sobre canciones de Silvio, cuya voz declamó sus creaciones poéticas. La otra parte, la energía, el gesto, lo plantó en las tablas el conjunto de bailarines de Acosta Danza, con precisión y organicidad en los movimientos, donde todos se concatenan y entrelazan para elevar la proyección escénica.
También apareció Mermaid (Sirena) esperada obra que realizó para sus protagonistas: Carlos Acosta y Marta Ortega, el afamado coreógrafo Sidi Larbi Cherkaoui, de quien ya vimos Fauno. Original pieza en la que vuelve a mover en la escena a una figura mitológica, esta vez una sirena. Imaginando cómo andaría un pez sobre la tierra, «calzó» a la dúctil bailarina contemporánea de unas zapatillas de puntas. En la historia ella busca ayuda para sobrevivir y ahí aparece la mano-guía de Carlos Acosta, quien regresó a las tablas con su carisma y fuerza. Juntos, elevaron el lirismo desbordante de esos minutos escénicos, donde ella deslumbró al auditorio, con energía, inteligencia, pasión y una entrega de altos quilates que dibujó con su cuerpo.
La segunda parte abrió con dos estrenos de la reconocida coreógrafa española María Rovira, quien ha dejado sus huellas en diversas obras en nuestra Isla, con el Ballet Nacional y Acosta Danza. En El salto de Nijinsky deambula por la vida y, sobre todo, el mundo interno, del célebre y enigmático bailarín. Con siete bailarines: tres mujeres y cuatro hombres arma este acertado trabajo en el que entrelaza el diseño de espacio, con un trabajo corporal muy estudiado, así como las actitudes, gestos y poses del legendario danzante, quienes potencian el escenario con suma coherencia y homogeneidad.
Instante alto de la jornada fue Impronta, el otro estreno de la propia Rovira. Aquí Zeleidy Crespo enseñó credenciales al encarnar la danza de Yemayá, en un instante mágico, de éxtasis danzario que recibió continuados aplausos, en una labor donde se conjuga excelente baile, preparación física y sutilezas a granel para atrapar al espectador.
Como punto final de la jornada subió Rooster, del inglés Christopher Bruce, uno de los más reconocidos coreógrafos de la segunda mitad del pasado siglo. Como nota de interés, esta obra de los años 80 se apoya en la música de la banda The Rolling Stones. En tono desenfadado Rooster atrae por el ritmo, la espectacularidad en algunos instantes –donde estaba presente también Carlos Acosta-, las canciones de la banda británica, los gestos que siembra en los bailarines con la formulación de dinámicas y fraseos pertinentes que lo enfocan como un espectáculo. Aunque en algunos de ellos, quizá por ser el debut (viernes 9), no estaban bien enraizados y no exhalaban ese carácter de espontaneidad en el gesto. Con el devenir de los días y adaptándose a la «diversidad» que propone la compañía en cuanto a tendencias y formas de bailar, ya deben estar superados.
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arletty dijo:
1
16 de febrero de 2018
11:30:49
Francisco Rivero dijo:
2
16 de febrero de 2018
23:31:07
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