ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
El gran respaldo popular de los cubanos a la Revolución, inquieta a los trasnochados anexionistas y a la derecha histérica de Miami. Foto: Juvenal Balán

Entre el 26 de febrero y el 2 de marzo de 1901, los órganos legislativos y la Presidencia de los Estados Unidos se las arreglaron para urdir una trama infame: la Enmienda Platt. Al debutante imperialismo estadounidense no le bastaba con haber intervenido en la guerra de liberación que por tres largas décadas había librado el pueblo cubano por su independencia del régimen colonial, sino debía mediatizar el nacimiento de la República con la imposición de condiciones onerosas para el ejercicio de la soberanía.

Resulta reveladora la circunstancia en la que el interventor Leonardo Wood comunicó a los constituyentistas cubanos el contenido de la Enmienda: un paseo en un yate de guerra por el sur de la isla: caza y pesquería. Simbólicamente, había que maniatar al caimán, o mostrar a la supuesta sardina los dientes del tiburón.

Cierto que en 1934 el humillante apéndice quedó derogado, pero solo con el triunfo de enero de 1959 y la decisión de la abrumadora mayoría de nuestro pueblo de darse para siempre la libertad, el espíritu plattista fue desterrado.

Por estos días, como desde hace tiempo, hay quienes tratan de revivir aquel triste expediente. Su base natural se halla en el sur de la Florida, aunque, no podemos ignorar, cuentan con algunos minúsculos mercenarios que les hacen el juego en el archipiélago, a contrapelo de la irreversible voluntad popular. Son esos neoplattistas trasnochados –neoanexionistas de pura cepa, cipayos de mala sangre- que aplauden el recrudecimiento del bloqueo y se desgañitan en las calles de Miami. Solo pueden interpretarse esos gritos como síntomas de impotencia y frustración.

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Frank dijo:

1

2 de marzo de 2020

08:22:01


Solamente quien no conozca un ápice de la historia patria puede evadir la responsabilidad de condenar el engendro que significó, entre otros medulares asuntos, otorgar al imperio el derecho a intervenir en Cuba cuando así lo estimara conveniente.

Yanetsy dijo:

2

2 de marzo de 2020

08:38:03


Contra nuestra #Cuba, jamás nos entenderemos.

Angel Rodolfo Díaz Cadalso dijo:

3

2 de marzo de 2020

15:09:39


Nuestra bandera algún día ondeará en todo nuestro territorio y ese pedazo de territorio ilegalmente ocupado será libre.