10 de Marzo de 2004

Defensa contundente

La esperada vista oral del proceso de apelación ante el Tribunal de Atlanta del caso de los Cinco Compatriotas Prisioneros Políticos del imperio tuvo lugar ayer en Miami. Ellos no estuvieron presentes, pero sí juristas de diferentes partes del mundo, periodistas, y miembros del gremio de abogados de los Estados Unidos y de organizaciones solidarias con el movimiento por la liberación de estos Patriotas.

Con brevedad, pero contundentemente, los abogados de la defensa demostraron en pocos minutos la insostenibilidad del cargo de conspiración para cometer asesinato por el que fue condenado Gerardo Hernández a cadena perpetua, la imposibilidad de que Miami fuera una sede justa para este proceso, y la necesidad de realizar un nuevo juicio en un lugar diferente. Los jueces del tribunal fueron inquisitivos acerca del hecho ocurrido el 24 de febrero de 1996 (derribo de avionetas de la organización terrorista Hermanos al Rescate radicada en Miami que violaron reiteradamente el espacio aéreo cubano) y qué relación podía esto tener con los cargos imputados a Gerardo Hernández. La fiscalía quedó a la defensiva y falta de argumentos.

Gerardo no es espía ni asesino, es un patriota. Así aseguraron la víspera los profesores titulares de la Facultad de Derecho de la Universidad de La Habana, doctores Rodolfo Dávalos y Julio Fernández Bulté, los periodistas Reynaldo Taladrid, Lázaro Barredo, Aixa Hevia, Arleen Rodríguez y Rogelio Polanco, durante la Mesa Redonda, programa televisivo conducido por Randy Alonso.

Los argumentos fueron explicados por la defensa. El primero expuesto por los letrados en la vista de ayer fue la impugnación —sobre la base del imperio de la Ley de inmunidades a soberanos extranjeros— de la negativa del tribunal del distrito a recibir la petición de sobreseimiento en el cargo de conspiración para cometer asesinato. La decisión del derribo de las avionetas fue tomada por el Estado cubano ante las agresiones a su integridad territorial y los hechos provocativos de la organización terrorista Hermanos al Rescate, no fue orientada por Gerardo. La mencionada ley dice que ningún Estado soberano puede ser juzgado en otro Estado —por otros tribunales, por otras jurisdicciones— , por decisiones tomadas en uso de su soberanía. Esto es extensible para los casos penales, como quedó probado por el abogado Paul Mackenna al referirse a casos anteriores en que así se admitió.

Esta doctrina de Actos de Estado, dijeron los panelistas, actúa como una eximente de la responsabilidad penal, por lo que Gerardo no tiene nada que ver con el delito de conspiración para cometer asesinato. Junto a ella también fue violada la doctrina de la Inmunidad Soberana, la cual establece la falta de jurisdicción del tribunal para juzgar a un Estado soberano. La primera excluye a Gerardo de la acción penal que se pretende ejercer sobre él, la otra hace incompetente al tribunal.

No hay una sola prueba ni evidencia que vinculen a Gerardo con el derribo de las avionetas, como mismo sucede con el delito de conspiración para cometer espionaje: nada relaciona a los Patriotas con información secreta, clasificada, referente a los intereses de la seguridad de los Estados Unidos. Así transcurrieron la vista oral y la conferencia de prensa, celebrada posteriormente en Miami.

La jornada de ayer demostró que se ha dado un paso importante y sólido en la causa de los Cinco. Ahora vendrán meses de espera para conocer el veredicto del Tribunal de Apelaciones de Atlanta, pero no los caracterizará la calma. Muchos amigos solidarios del mundo continuarán la batalla incesante por la verdad y la justicia en defensa de nuestros Cinco Compatriotas Luchadores contra el terrorismo.

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