WASHINGTON, 20 de mayo.— "La demanda de drogas y la violencia
tienen raíces a ambos lados de la frontera", dijo hoy el presidente
de México, Felipe Calderón, al intervenir ante el pleno del Congreso
estadounidense, reporta PL.
En sus palabras en el foro presidido por el vicepresidente de
Estados Unidos, Joseph Biden, y la presidenta de la Cámara de
Representantes, Nancy Pelosi, el mandatario abordó aspectos
neurálgicos de las relaciones bilaterales.
Con ese objetivo, el Presidente mexicano pidió a los legisladores
estadounidenses que vuelvan a prohibir la venta de armas de alto
poder, para frenar así el suministro de pertrechos que cruzan la
frontera común y terminan en manos de los cárteles de la droga,
refiere AP.
Sin embargo, la reacción no se hizo esperar y el senador
republicano John Cornyn sostuvo en un comunicado que la segunda
enmienda de la Constitución estadounidense, que permite a los
ciudadanos poseer armas, "no está sujeta a negociaciones
diplomáticas, con México ni con ningún otro país".
Calderón abordó además el polémico tema migratorio, y manifestó
que "ha llegado el momento de trabajar en conjunto, reducir las
causas de inmigración y canalizar este proceso de manera
organizada".
De igual modo, ratificó su total desacuerdo con la ley aprobada
recientemente en Arizona, la SB1070, porque "no solo ignora una
realidad que no se puede ignorar por decreto, sino que da pie a la
discriminación racial".