Un eventual uso masivo de escáneres corporales en los aeropuertos
de Reino Unido implantado por el gobierno en extrema medida de
seguridad reavivó este martes las posiciones contrapuestas y las
advertencias en el plano de la legalidad, reporta Prensa Latina.
La posibilidad de reforzar los controles a pasajeros mediante
radiografías a cuerpo desnudo desató fuertes críticas entre expertos
legales británicos, parlamentarios y organizaciones defensoras de
los derechos humanos del país europeo.
El jefe de la comisión parlamentaria de Igualdad y Derechos
Humanos, Trevor Phillips, advirtió que la implantación de los
escáneres de cuerpo completo podría violar la privacidad de los
ciudadanos y las leyes contra la discriminación por raza, credo,
sexo o discapacidad.
Phillips aseguró que el gobierno debe garantizar que esa medida
sea legal, justa y respete los derechos ciudadanos a las libertades
concebidas.
Subrayó que existen serias preocupaciones sobre la violación de
la privacidad, la intimidad, así como en materia de discriminación
ante una aparente falta de garantías en tales procedimientos.
Los abogados Matrix Chambers, Helen Mountfield y el profesor
Conor Gearty opinaron que la comisión podría llevar la discusión
ante los tribunales antes de la introducción masiva de los escáneres
en todos los aeropuertos británicos, prevista para finales de este
año.
Dentro de la Unión Europea solo Reino Unido, Italia y
parcialmente España anticiparon la decisión de implantar esa medida
luego del fallido atentado en un avión que cubría la ruta
Ámsterdam-Detroit, el 25 de diciembre pasado.
El primer ministro, Gordon Brown, dio luz verde para la
introducción limitada de los escáneres en los aeropuertos de
Heathrow y Manchester.
Las organizaciones no gubernamentales denunciaron entonces el uso
de esos aparatos en los registros a menores por violar la ley de
Protección de los niños contra la pornografía infantil y los abusos
sexuales.
La disposición inconsulta de la secretaría de Transporte de
presentar un código provisional sobre la práctica del uso de esos
dispositivos fue objeto también de un aluvión de críticas en los
medios periodísticos británicos.
Un asesor jurídico de la comisión de Igualdad y Derechos Humanos
alertó que mientras el ministro de Interior asegura a los diputados
que los escáneres se utilizan de manera aleatoria, el proyectado
código no ofrece indicación de cómo se garantizarán los derechos
ciudadanos y el respeto de las leyes de igualdad contra todo tipo de
discriminación.
El gobierno alega que el incremento de los niveles de amenaza
terrorista para Reino Unido obliga a una implantación inmediata de
los escáneres a cuerpo completo.