El infierno de este mundo está hoy en la calle Dessalines. Lo que 
			hace siete días era el centro comercial de la capital haitiana, es 
			hoy la sede del sálvese quien pueda¼ Allí 
			una mujer llora porque alguien le arrebató de las manos lo que había 
			hallado en una de las tiendas destruidas.
			Fue pura casualidad lo que nos llevó hasta el arrasado boulevard. 
			Esquivando escombros, calles obstruidas, tranques del tráfico¼ 
			entramos a Dessalines, donde cientos de haitianos desesperados 
			irrumpen en los comercios, mientras a la policía haitiana y a la 
			MINUSTAH les resulta casi imposible mantener el orden, aun a punta 
			de pistola. Todos corren de un lado a otro buscando qué llevarse. Lo 
			que se oculta bajo los escombros puede ser el sustento para estos 
			días que pintan infernales. 
			El hambre y la falta de dinero los empujan a arriesgar sus vidas 
			cuando con palos, tubos y herramientas horadan las paredes 
			resentidas por el terremoto. Parece no importarles tal peligro, 
			quizás el llanto de sus hijos en el quimbo sea ya irresistible. 
			Cualquier cosa puede ayudarlos a sobrevivir. Hay quien encuentra 
			zapatos, ropas, comida, medicinas¼ hay 
			también quien espera en la calle para sustraer lo ya robado. En 
			algunas de las tiendas, o en las ruinas de ellas, están apostados 
			sus dueños, quien se acerque puede recibir una respuesta violenta. 
			Pero los ánimos ya están caldeados y el desespero ciega. 
			Se cumplió una semana del temblor de esta tierra, aunque su gente 
			continúa estremeciéndose. 
			
          Haití: el infierno de este mundo (I) 
			
			
			Haití: el infierno de este mundo (II)
			
			Haití: el 
			infierno de este mundo (IV)
            Haití: el infierno de este 
			mundo (V)
			
			Haití: el 
			infierno de este mundo (VI)
			
			Haití: el 
			infierno de este mundo (VII)
			
			Haití: el 
			infierno de este mundo (VIII)
			
			Haití: el 
			infierno de este mundo (IX)
			
			Haití: el 
			infierno de este mundo (X)
			
			Haití: el 
			infierno de este mundo (XI)
            
            Haití: el infierno de este 
			mundo (XII)
			
			Haití: el infierno de 
			este mundo (XIII)