ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
Foto: Internet

Matanzas.-Con la presencia del ministro cubano de Cultura, Alpidio Alonso, se realizó la gala de entrega del Premio Nacional de Teatro 2020, que este año distinguió a los matanceros Rubén Darío Salazar y Zenén Calero Medina, homenaje que tuvo en esta ciudad una gran acogida.

Se trata de creadores de primerísima importancia, dos orfebres del teatro, dijo Alonso al exaltar la obra de estos artistas, hijos del talento y el trabajo creador, como quedó plasmado en las palabras de elogio escuchadas en el ya mítico Teatro Sauto.

La ceremonia, toda una puesta en escena, recordó además los 26 años de creado del Teatro de Las Estaciones, el sueño hecho realidad de ambos profesionales, cuyos nombres se recordarán con gratitud por mucho tiempo en el ámbito matancero y del teatro de niños y títeres.

Amigos por motivos comunes, aunque ninguno tan legítimo como esa vocación por crear y dignificar el mundo de los títeres. Rubén, con esa palpitación de vida que contagia; persistente, incansable; dirige y es capaz de hacer más de una cosa a la vez. Zenén, el diseñador escénico de manos mágicas.

Un binomio inigualable, según el destacado dramaturgo Uilises Rodríguez Febles. Ambos han logrado una comunicación muy entrañable con ese auditorio que los conforman mayoritariamente los niños, quienes constituyen el sentimiento esencial de su obra y de sus vidas.

Con ellos dos, Matanzas cuenta ya con cinco premios nacionales de Teatro, entre los que se cuentan además Abelardo Estorino, José Milián y René Fernández.

Este premio, y hablo en nombre de los dos, es combustible, energía para ser mejores, dijo Rubén Darío en gesto de agradecimiento y compromiso.

COMENTAR
  • Mostrar respeto a los criterios en sus comentarios.

  • No ofender, ni usar frases vulgares y/o palabras obscenas.

  • Nos reservaremos el derecho de moderar aquellos comentarios que no cumplan con las reglas de uso.