Más de 600 alumnos y profesores, en su mayoría estadounidenses,
han compartido durante los últimos dos días con universitarios
cubanos, mientras han recorrido sitios de interés histórico y
cultural.
Desde que partieron de Londres en agosto a bordo de esa escuela
flotante han estado en países de Europa, África y América Latina.
"Nunca me he sentido tan bien recibido por la población como aquí",
comentó Kevin, de la Universidad de Nebraska, este martes durante un
breve encuentro con periodistas antes de su actividad de despedida.
Los estudiantes cubanos son muy acogedores, afirmó por su parte
Melody, de la Universidad de Virginia. Mientras, la canadiense
Morgina aseguró que ya está tratando de organizar su próximo viaje a
Cuba. A diferencia de sus compañeros estadounidenses, ella no tendrá
que solicitar una licencia a su gobierno para venir a nuestro país.
Según anunció Les McCabe, presidente del Instituto de Estudios a
Bordo, que administra el programa académico Semestre en el Mar,
tienen la intención de regresar en el 2014.
Asimismo, mostró satisfacción por estar aquí después de nueve
años. Nuestro programa se propone educar a jóvenes para que alcancen
una perspectiva global de la realidad —explicó Les McCabe—, y por
eso los llevamos en el recorrido a países más y menos desarrollados,
con diferentes culturas, lenguajes y sistemas políticos.
Cuba es uno de los países más próximos geográficamente —añadió—,
y sin embargo para muchos norteamericanos está muy lejos. A su
juicio, este tipo de intercambios contribuye a mejorar las
relaciones bilaterales.