En los últimos 20 años, precisa el informe, esa problemática se
incrementó en las ciudades analizadas, donde las diferencias entre
ricos y pobres se duplicaron y las desigualdades en los ingresos
aumentaron en un 15 %.
En una entrevista al diario El Espectador, el director de
Investigación y Desarrollo de Capacidad de esa Oficina de la ONU,
Eduardo López, señaló que el crecimiento económico registrado en el
país en las últimas dos décadas "no fue nada en favor de los
pobres".
Uno de los resultados claros del estudio es que el crecimiento no
reduce las desigualdades, sino la atención que se le dé a la
desigualdad misma. Hay que evitar que los mercados funcionen bajo
lógicas de acaparamiento y monopolio, especificó.
Las ciudades estudiadas crecieron espacialmente de dos a tres
veces más de lo requerido, añadió, y ese crecimiento en las
periferias afecta el medioambiente, los intereses de los pobres y
genera más desigualdades.
Al referirse a la inequidad urbana en América Latina en su
conjunto, el experto opinó que en los últimos diez años se ha
conseguido revertir las tendencias de crecimiento de la desigualdad
y es la única región en el mundo que experimenta cambios positivos.
(PL)