El
dúo Buena Fe abarrotó este jueves el teatro Eddy Suñol, cuando
cientos de holguineros ocuparon hasta los pasillos laterales del
recinto para escuchar las creaciones de Israel Rojas y Joel Martínez
en su última propuesta, titulada Dial: homenaje a la Radio Cubana.
Rojas, contento de volver a cantar al público holguinero, respondió
gustoso nuestras preguntas.
¿Qué significación tienen las Romerías de Mayo?
-La verdad es que tenemos muy buenas experiencias con el público
holguinero y con esta provincia. Como músicos, estuvimos en las
Romerías en el año 2000. Ese mayo fue muy importante. Las Romerías,
definitivamente, son un evento extraordinario. En aquel momento,
para nosotros fue un descubrimiento pues no sabíamos que existía
algo de esta magnitud. Tuvimos muchas experiencias de todo tipo,
pero desde el punto de vista creativo, fue sumamente importante.
Aquí se sentaron las bases de lo que más tarde fue el disco
Déjame entrar. Aquí fue nuestra prueba de fuego con el público,
después de una etapa de trabajo más enfocada en el mundo de la trova
y en la canción de pensamiento. Fue donde primera vez empezamos a
ganar una especie de respeto. La primera vez que la crítica
especializada comenzó a hablar de nosotros con tino, con cierto
cariño. Se percataron que estaban ante el embrión de un trabajo
mucho más serio. Profesionalmente, fueron las Romerías de Mayo las
que marcaron en nosotros un antes y un después.
Sobre el concierto en el Suñol, ¿cuál fue la idea dominante?
-La idea del concierto fue llevarle al público buena parte de la
obra que está contenida en Dial, que es nuestro más reciente disco,
y que presentamos los días 8, 9 y 10 de febrero, en el Karl Marx. Un
concierto realmente excelente que pudimos dar allí. Fue la
plataforma de lanzamiento del disco, pero no quisimos dejar pasar la
oportunidad y en cuanto nos hicieron el primer guiño aprovechamos la
ocasión de estrenarlo aquí.
¿Qué puedes decirnos de Dial?
-Dial es un disco que intenta reverenciar el arte de escuchar. En
un tiempo en que la música y las artes, en sentido general, tienen
mucho de video clip, de audiovisual. Además, con esto de las nuevas
tecnologías, la gente ha dejado de escuchar los discos. Escuchan
parte de un disco o preseleccionan un tema determinado, que los
medios casi siempre te imponen, y se hacen casi homogéneamente su
propia lista de canciones. El disco, como muestra del alma de un
artista, no tiene la vida que tuvo en décadas anteriores. Esto es
innegable e inevitable por el desarrollo de las nuevas tecnologías.
Entonces, lo que intentamos es hacer una alianza entre las
estéticas casi en decadencia del disco y la radio, que además en
Cuba está cumpliendo 90 años, y hacer un disco que bebiera casi
artesanalmente de esa tradición auditiva, de ese espectáculo para el
oído que son ambos.
Y así, Dial es una suerte de homenaje a la radio cubana. La
dramaturgia casi radial es una especie de hilo conductor,
culturalmente, para ir enlazando cada una de las canciones que, a la
corta y a la larga, son crónicas de nuestra vida diaria porque es lo
que sabemos y nos encanta hacer. (