En Romerillo
Laboratorio de arte
Alexis Leyva Machado (Kcho) conversa con Granma
sobre el proyecto de utilidad social que desde hace unos meses
desarrolla en esta barriada
Amelia
Duarte de la Rosa
Conocida por muchos y visitada por pocos, Romerillo es una
comunidad periférica del Consejo Popular Cubanacán, situada en el
municipio de Playa, en la capital. No es un barrio con lujosos
palacetes y mansiones de estilo francés o Art Decó. Tampoco tiene
grandes avenidas ni centros culturales y comerciales. Sin embargo,
aunque parezca cosa muy rara encontrar en un suburbio humilde
valores artísticos tangibles, Romerillo —desde hace unos meses— se
ha ido transformando en un laboratorio para el arte, en un lugar
donde cultura y comunidad van de la mano.
Con
el cartel que identifica las labores que se realizan en Romerillo.
Liderado por Kcho, el proyecto de innovación social tiene
resultados notorios en los espacios físicos. Desde octubre pasado,
los habitantes de Romerillo disfrutan de seis nuevos parques y áreas
de descanso (erigidos sobre antiguos basureros y terrenos baldíos);
un anfiteatro y una sala de proyecciones audiovisuales en la Casa de
Cultura; así como la mejoría del alumbrado y el servicio telefónico
público; la remodelación de la bodega; el saneamiento de lugares con
escombros y salideros de aguas albañales, por solo enumerar algunos
de los cambios.
El artista, que nuevamente ha decidido abocar su arte a una labor
altruista de disuasión, de didactismo, motivación y de interés
general por el ambiente artístico, comenta a Granma los
objetivos y expectativas que tiene con esta nueva intención
comunitaria.
En un antiguo taller de reparación de ómnibus escolares, ahora en
proceso de remodelación, un cartel expone: Proyecto de utilidad
social Kcho Estudio Romerillo (Laboratorio para el arte).
Contará con dos espacios de uso público dedicados al conocimiento y
la cultura: La biblioteca Comandante de la Revolución Juan Almeida
Bosque, con todos los medios y recursos necesarios para el estudio;
y la sala de arte Martha Machado Cuní, que abrirá sus puertas a
exposiciones de arte, presentaciones de libros y otras actividades
culturales.
Parque
dedicado al Comandante Hugo Chávez.
Recorriendo sus áreas en construcción, Kcho nos explica que
piensa convertirlas en lugares de presencia constante en la
cotidianidad de los habitantes.
"Conectado a las transformaciones en los espacios físicos de la
comunidad, estamos creando una vía para comenzar a transformar
también los espacios mentales, eso no se cambia en un día, pero todo
es posible vinculando energías".
"La sala-galería acogerá exposiciones de artistas nacionales e
internacionales. La idea es inaugurarla con Wifredo Lam y conmemorar
el aniversario 110 de su natalicio. Queremos que sea una especie de
museo comunitario didáctico, que la gente venga a aprender. Pienso
que es importante que se disfrute y se entienda el arte. Vamos a
hacer talleres con los niños y traer a la comunidad muestras de
importantes pintores como Joan Miró, Andy Warhol, el escultor
francés Arman, Spencer Turner¼ son
trabajos que yo he coleccionado y se van a exhibir para todos".
En los alrededores de la galería se exponen nueve esculturas de
su autoría y una tarja en la pared trasera dedicada a Lam, obra de
los artistas cienfuegueros Alain Moreira y Antonio Nuñez. Justo
enfrente de la entrada se levanta la biblioteca pública, en donde
Kcho asegura se podrán encontrar libros de arte, ciencia, tecnología
e incluso computadoras, todo en función de potenciar el
conocimiento.
Además
de favorecer el alumbrado público, la reparación de las vías y el
saneamiento del barrio, se dieron a la tarea de crear terrenos
deportivos, un gimnasio biosaludable y un parque infantil.
Pero el proyecto es mucho más ambicioso, el complejo incluye,
además, un centro documental de arte, un aula para dar clases de
pintura y grabado, un taller de fundición y otro de grabado, una
carpintería, un almacén y una pequeña sala de cine-teatro para obras
de pequeño formato.
En el medio de toda la construcción está su taller, el centro
permanente de creación del artista. Sin embargo, luego de un
detallado recorrido por el lugar, Kcho nos lleva a caminar adonde
está lo mejor: las calles del barrio.
TRANSFORMAR LOS ESPACIOS, CAMBIAR LA MENTALIDAD
No se trata solo de establecer mi estudio en Romerillo, sino de
contribuir a la transformación del barrio para que la gente comience
a cambiar de actitud, que participen y se movilicen por su
comunidad, dice. "Lo más importante fue identificar el problema y
las necesidades. Aquí, por ejemplo, a la gente le gusta el deporte
así que creamos parques donde puedan jugar básquet, voly y fútbol.
En siete meses, con la colaboración del Gobierno provincial y el
Instituto de Planificación Física, se han rehabilitado y recuperado
terrenos en desuso, basureros y focos de vectores. No es un acto de
magia, es un acto de trabajo, voluntad y constancia".
"Impedimentos y problemas no han faltado. Hace un tiempo
rompieron un teléfono público, se han llevado lámparas de los
parques, han rayado los murales, pero vamos a arreglarlo todas las
veces que sean necesarias para que vean que vamos en serio, solo así
la gente podrá cambiar su forma de pensar y adquirir sentido de
pertenencia".
"Ha sido un trabajo de a poco, las personas han ido respondiendo
a las convocatorias. Creo que lo más importante ha sido darle
continuidad al trabajo. No basta con mostrar el arte, hay muchas
maneras de lograr imbricarlo para que influya positivamente y de
manera real en la vida social, por eso están los espacios físicos.
Se le puede mostrar a la gente que las áreas se logran transformar,
hay que construir cosas para que los habitantes atesoren su zona.
Aquí estamos creando una metodología que puede funcionar en
cualquier lugar de Cuba".
Caminar por Romerillo es mucho mejor de lo que alguien espera, en
cualquiera de sus cuadras se identifica una obra de Kcho, áreas de
estar, un parque dedicado al Comandante Hugo Chávez entre canchas de
fútbol y aros de básquet. Sus habitantes lo saben y agradecen a su
gestor, natural de la Isla de la Juventud.
Al final de la conversación, una pregunta que nos ha inquietado
durante todo el recorrido: ¿Por qué Romerillo?
"Porque este es mi barrio, llegué con 15 años a la escuela y
mientras estudié en el ISA este era el lugar más inmediato cuando
salía a comer algo y socializar con la gente. Yo me crié aquí y
tengo muy buenos recuerdos de esa época. Conozco a casi todo el
mundo. Un día pasé y lo encontré todo igual, los mismos baches en la
calle, los mismos problemas, así que decidí hacer algo para cambiar
a Romerillo, un lugar al cual le debo y tengo mucho que agradecer". |