Con la presencia del violoncellista chino Ray Wang transcurrirán
las últimas veladas sinfónicas del director japonés Yoshikazu
Fukumura, que a lo largo de un mes han enriquecido la vida musical
de la capital cubana.
El próximo domingo, a las 11:00 a.m. en la sala Covarrubias, los
maestros invitados protagonizarán, junto a la Orquesta Sinfónica
Nacional, un programa basado en música francesa que incluye el
Bolero, de Maurice Ravel, dos obras de Gabriel Fauré: la suite
Peleas y Melisanda; y Elegía para cello y orquesta,
con Wang en calidad de solista; y La musa y el poeta, de
Camille Saint Saens, en la cual el chino compartirá el papel
concertante con el violinista cubano Ariel Sarduy.
Fukumura se despedirá el miércoles 3 de octubre (y no el domingo
7, como se había anunciado) en la propia sala a las 6:00 p.m., esta
vez con la Sinfónica Juvenil, integrada por estudiantes de los
conservatorios habaneros.
Esa tarde el conductor nipón dirigirá Danzas de Galanta,
del húngaro Zoltan Kodaly; y la Sinfonía no. 41, Júpiter,
de Wolfgang Amadeus Mozart; y acompañará a Wang en el Concierto
no. 1 para cello y orquesta, de Saint Saens.
Natural de Hong Kong, Ray Wang ha ofrecido recitales y conciertos
en Estados Unidos, Italia, Inglaterra, Luxemburgo, Alemania, España
y Canadá, además de presentarse en las más importantes plazas
asiáticas.
Pertinaz ejecutante de la música de cámara se cuenta entre los
fundadores del ensemble Virtuosi di Hong Kong, el Trío Canzone y el
cuarteto de cuerdas New Art.
Ha dedicado también parte de su carrera a la docencia en
conservatorios de Shanghai, Wuhan, Xinghai y Taipei y en la escuela
superior de Queensland, Australia.
En la actualidad se desempeña como Jefe del departamento juvenil
y Jefe de la cátedra de instrumentos de cuerdas de la Academia de
Artes de la Interpretación en Hong Kong.