Si bien las acciones que se realizan en pos de aumentar la
cultura tributaria están aún en ciernes y muchos de los
entrevistados son noveles en este tipo de gestión, entender el
sistema tributario y su importancia es tan vital para el progreso
del trabajo no estatal como para el desarrollo de los programas
sociales que estas contribuciones sostienen.
La gran mayoría de los entrevistados, sin embargo, fue incapaz de
reconocer el nombre de los tributos que pagaban o el régimen al que
pertenecían. Asimismo, solo unos pocos dijeron conocer la potestad
del Consejo de la Administración Municipal de elevar las cuotas
mínimas mensuales.
Con respecto a su comprensión, algo más de un tercio de los
trabajadores calificó de complicado el sistema tributario. Una de
las tendencias más llamativas, empero, es que más de la mitad de
ellos manifestó no dedicar ningún tiempo a su estudio.
Con respecto a los trabajadores contratados, que al cierre de
abril constituían el grupo más numeroso del total de todos los
trabajadores por cuenta propia en el país y, por tanto, el mayor
número de contribuyentes, los resultados fueron interesantes.
Esta figura, perteneciente al régimen simplificado de tributación
con características específicas, abona el 10 % de la cuota mensual
que a cuenta del Impuesto sobre Ingresos Personales paga el titular
que lo contrata.
Justamente muchas de estas personas alegaron desentenderse de los
montos que debían abonar y declararon que era su empleador quien se
encargaba de llevar sus obligaciones fiscales. Casi ninguna de ellas
fue capaz de señalar los tributos que abonaban, y solo algunas
reconocieron pagar la Contribución a la Seguridad Social.
En los últimos tiempos, diversas fuentes se han referido a la
elaboración, para su discusión y aprobación legislativa, de un
proyecto de nueva Ley Tributaria, que simplifique los procedimientos
hasta ahora establecidos, lo que debe contribuir a comprender dichos
métodos, pero la concientización del deber ciudadano del pago de los
tributos no depende, necesariamente, de este recurso.
Aunque el estudio del sistema tributario por parte de los
trabajadores por cuenta propia ha de constituir en primer lugar una
preocupación propia, lo cierto es que el conocimiento hasta ahora
adquirido es insuficiente. A pesar de que algunas entidades, entre
ellas la Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba,
realizan esfuerzos para brindar capacitación a este sector laboral,
mucho queda aún por hacer. ¿Es posible tributar adecuadamente si no
se conocen las peculiaridades del sistema?
Igualmente, el fortalecimiento de la gestión de la administración
tributaria debe crecer, en igual medida, en lo que atañe a informar
y educar a la población. Todavía queda pendiente el diseño de
estrategias comunicativas eficaces que puedan ser implementadas por
esta Oficina con el objetivo de elevar la comprensión sobre dicho
sistema.
Aparejado al afianzamiento de esta forma de gestión, debe
observarse el fomento de una cultura tributaria que, a todas luces,
muestra por delante un camino mucho más largo que el ya recorrido.
Como se describe en los Lineamientos aprobados en el Sexto Congreso
del Partido, para desarrollar el valor cívico de contribución al
sostenimiento de los gastos sociales, es preciso promover un
conocimiento que permita el cumplimiento cabal de las obligaciones
tributarias.