La Unión Africana (UA) acordó buscar apoyo de las Naciones Unidas
con el objetivo de intervenir militarmente en Malí, donde el
ejército protagonizó un golpe de Estado en marzo último, se informó
hoy.
El acuerdo fue adoptado el jueves en una reunión coordinada aquí
por el bloque panafricano y la Comunidad de Estados de África
Occidental (Cedeao) y en la cual participaron el representante de la
ONU para África Occidental, Said Djinnit, y delegados de Argelia y
Mauritania.
En un comunicado divulgado aquí se precisa que los representantes
del Grupo de Apoyo y Seguimiento de la UA para esa nación del oeste
africano subrayaron el imperativo y la urgencia de una acción
internacional estrechamente coordinada, rápida y eficaz.
Tal empeño estaría dirigido a liberar el norte maliense donde,
según el texto, se desarrollan lazos entre redes terroristas y
criminales.
La asonada castrense del 22 de marzo rompió el orden
constitucional vigente y promovió la presencia de grupos armados
islámicos en el norte, señaló Prensa Latina.
El Movimiento Nacional de Liberación de Azawad proclamó en abril
último la independencia en la denominada República de Azawad, franja
septentrional que comprende un extenso territorio cuyas principales
ciudades son Tombuctú, Gao y Kidal.
Otros grupos que también operan en esa región maliense son Ansar
Din y Al Qaeda en el Magreb, ambos de confesión islámica.
La nota indica que la intervención demandaría esfuerzos
regionales e internacionales, en el marco de la UA, y una
colaboración estrecha de las Naciones Unidas y otros miembros de la
comunidad internacional.
Los delegados a la reunión exigieron también la renuncia de los
golpistas y el restablecimiento del orden constitucional, mediante
la disolución de la junta militar y su retiro por completo de la
gestión de transición.
En ese sentido, exhortaron a las fuerzas políticas y sociedad
civil a establecer un diálogo nacional y establecer un programa que
conlleve al cumplimiento de los objetivos de la transición.
Golpistas, partidos políticos de oposición y autoridades de la
Cedeao acordaron el mes anterior establecer un período de transición
por un año en Malí, lo cual generó malestar en ciertos sectores.
Al inaugurar ayer la reunión, el ministro de Relaciones
Exteriores de Costa de Marfil, Daniel Kablan Duncan, explicó que el
encuentro debe examinar si es necesario preparar una resolución en
el Consejo de Seguridad de la ONU que permita una intervención
militar en Malí para solucionar la crisis.
El presidente de la Comisión de la Cedeao, Kadre Désiré Ouedraogo,
indicó que tienen el deber histórico y estamos de acuerdo en una
estrategia común para determinar las modalidades y acciones a
adoptar, incluyendo medidas militares.
Por su parte, el presidente de la Unión Africana, Jean Ping,
subrayó que respecto a la unidad e integridad territorial de Malí no
puede haber ninguna discusión o negociación.