Santiago de Chile amaneció hoy en estado de preemergencia
ambiental debido a la alta contaminación atmosférica, causante de
cuatro mil muertes en Chile cada año, advirtió Prensa Latina.
El empeoramiento de las condiciones de ventilación conllevaron a
la Intendencia Metropolitana a decretar restricciones para la
circulación de vehículos, tanto no catalíticos como catalíticos.
Se mantiene además la prohibición de encender todo tipo de
calefactores a leña o biomasa, estén o no provistos de sistema de
doble cámara de combustión.
El Ministerio de Educación está facultado para ordenar la
suspensión de las clases de Educación Física en los colegios, además
de que la ciudadanía debe abstenerse de practicar actividades
deportivas al aire libre.
Diferentes organismos gubernamentales fiscalizarán también el
cumplimiento de las medidas orientadas en industrias, chimeneas
domiciliarias y en la vía pública.
Al declararse Preemergencia Ambiental significa que las
autoridades prevén que las condiciones de calidad del aire podrían
alcanzar niveles considerados malos, es decir, un Índice de Calidad
del Aire referido a Partículas (ICAP) en el rango entre 300 y 499.
Si ese indicador es superior a 500 correspondería dictar
emergencia ambiental.
De los elementos que flotan en el aire, el material particulado
fino es el más dañino para la salud, según los especialistas, ya que
se concentra en los pulmones a nivel alveolar. Para la decana de la
Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, Cecilia Sepúlveda,
la muerte cada año de cuatro mil personas como consecuencia de la
polución existente refleja que hay una crisis en la materia.
Creo es una situación grave y alarmante que exige medidas que
vayan al fondo y nos involucren a todos, afirmó.