Miles de residentes del sur de Tailandia permanecen hoy
evacuados, tras intensas lluvias que inundaron varios distritos del
país, arrasando viviendas en centros urbanos y áreas remotas y
aisladas, advirtió Prensa Latina.
Las crecidas se reportaron inicialmente en Kapur, donde 500 casas
quedaron bajo las aguas y otras mil en zonas de más intrincados
accesos, a lo que se añadió después otras mil 500 comunidades
golpeadas por igual, incluidos criaderos de cerdos y camarones.
Hasta el jueves las autoridades prohibían el retorno de los
damnificados a sus lugares de origen dada la posibilidad de nuevas
lluvias y otras severas inundaciones.
Agencias de socorro se movilizaron hacia diversas localidades de
terrenos bajos en previsión de que se extienda hacia allí el
fenómeno meteorológico con adicionales efectos catastróficos.
En Phatthalung, las caídas de agua naturales en un número de
parques nacionales fueron declarados de acceso prohibido a los
turistas, al igual que los pasos para escalar la montaña Banthad.
Todavía no se ha podido hacer un balance estimado de los daños
ocasionados por las precipitaciones pluviales, en el comienzo de una
temporada que pudiera resultar devastadora.