RÍO DE JANEIRO.— El embajador de Cuba en Brasil,
Carlos Zamora, expresó hoy a la familia del afamado arquitecto Oscar
Niemeyer el más sentido pésame y sentimiento de solidaridad del
pueblo y gobierno cubanos por el fallecimiento de Anna María
Niemeyer.
"Deseo trasladar nuestro pésame y sentimiento de
solidaridad a esa figura emblemática, legendaria y gran amiga de
Cuba que es Oscar Niemeyer, por el fallecimiento de su hija única",
manifestó Zamora a integrantes de la familia en la capilla 2 del
Cementerio Sao Joao Batista, en Botafogo, en la zona sur de esta
ciudad, donde fue velado el cuerpo de Anna María.
Anna María Niemeyer falleció ayer a los 82 años, en
el hospital Samaritano, en Botafogo, víctima de un enfisema
pulmonar, y fue enterrada esta tarde en el campo santo Sao Joao
Batista.
En la despedida del duelo, Carlos Oscar Niemeyer,
hijo de Anna, recordó que el afamado arquitecto estuvo por última
vez con su hija el pasado día 3, durante una visita al Samaritano.
Nacida en Río de Janeiro, Anna María era arquitecta
de interiores, diseñadora y comerciante. Desde muy joven ayudó a su
padre en diferentes proyectos, en particular en la ambientación de
interiores de los palacios de La Alborada (residencia presidencial)
y de Planalto (gobierno), ambos en Brasilia.
Además, trabajó en la decoración de las sedes del
Congreso Nacional y del Supremo Tribunal Federal, también en
Brasilia, donde residió desde 1960 hasta 1973, de acuerdo con el
sitio web G1, el portal de noticias de la Globo.
Anna María era propietaria de dos galerías de arte,
ubicadas en Gavea, en la zona sur de esta ciudad. Deja cinco hijos,
13 nietos y cuatro bisnietos, informó PL.