El gobierno de Ucrania expresó hoy su indignación por la condena
a 10 años de cárcel dictada por un tribunal libio contra 19
nacionales, a quienes acusaron de intento de asesinato.
El vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores, Oleg Voloshin,
aclaró que el destino de los ucranianos condenados depende ahora de
la decisión que tome un tribunal de apelaciones de Tripoli.
No solo nos preocupa, sino que nos indigna la forma en que se
realizó el juicio y las condenas, todas sospechosamente iguales, lo
cual habla de la calidad del juicio, afirmó.
En dependencia de cómo se resuelva el asunto de nuestros
ciudadanos, así serán los nexos con Libia, incluidos los económicos
y energéticos, declaró el portavoz.
Los ucranianos no participaron en ninguna acción bélica y mucho
menos mataron a personas, ni fueron allí como mercenarios, aclaró.
Consideramos injusta la decisión de condenar a nuestros
ciudadanos a 10 años de cárcel y trabajo forzado, remarcó Voloshin.
La víspera, además de los ciudadanos ucranianos, un ruso fue
condenado a cadena perpetua y otro a 10 años, al igual que tres
belarusos.
El portavoz del ministerio ruso del Exterior, Alexander
Lukashevich, condenó la injusta decisión judicial, sobre todo, tras
las largas negociaciones sostenidas con el nuevo gobierno libio para
poner en libertad a los eslavos.
El grupo de más de 20 personas, en su mayoría de avanzada edad,
fue apresado poco después de ser asesinado el dirigente libio Muamar
Gadafi y caer Tripoli en manos de la oposición armada, a finales del
pasado año, señaló Prensa Latina.