Autoridades haitianas decretaron este viernes nuevamente el
estado de alerta por las fuertes lluvias, que dejaron el pasado mes
al menos 16 muertos, siete mil 600 evacuados y centenares de
sembrados y viviendas destruidos.
De acuerdo con la Dirección de Protección Civil, los
departamentos en mayor riesgo por los aguaceros son los Norte y la
región Oeste.
El Centro Nacional de Meteorología indicó que las
precipitaciones, provocadas por una vaguada al norte de la isla de
La Española, continuarán durante todo el fin de semana, reporta
Prensa Latina.
La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), de
Naciones Unidas, informó el pasado lunes que las tormentas de la
semana anterior provocaron serios estragos en los campamentos para
damnificados del terremoto de enero de 2010.
Al menos tres mil 400 familias de desplazados por el sismo fueron
evacuados y unos mil 600 de ellos se vieron en una situación de alta
vulnerabilidad por las aguas, aseguró la OCHA.
La falta de alcantarillados y drenajes convierte a los barrios
haitianos en auténticas lagunas cada vez que llueve y cuando las
aguas se vuelven persistentes, como ahora, las inundaciones pueden
alcanzar entre dos y tres metros de altura.
A inicios de mes, las lluvias dejaron otros seis fallecidos, unos
700 desplazados y un centenar de viviendas destruidas en la región
norte de Haití.
La OCHA denunció a finales de marzo anterior que unos 65 mil
damnificados del terremoto de enero de 2010 están en peligro por las
precipitaciones y alertó además ante el peligro de que las aguas
provoquen un pico en la epidemia de cólera.
El Ministerio de Salud informó que desde el inicio de las lluvias
a inicios de esta semana se reportan al menos 150 casos cada día.
Esa enfermedad, cuyo primer caso se registró en octubre de 2010,
costó la vida a más de siete mil personas y contagió a otras 500
mil, casi cinco por ciento de la población.