Al final, el cierre fue perfecto, porque los cinco boxeadores
cubanos que avanzaron a la discusión del título, en Bulgaria,
salieron por la puerta ancha y la Mayor de las Antillas dominó el
segmento masculino del torneo Strandzha con seis medallas (5-0-1),
en el inicio de su fogueo competitivo rumbo a los Juegos Olímpicos
de Londres.
Justo así, en la sala Universiada de Sofía, los campeones
mundiales Lázaro Álvarez (56 kg) y Julio César La Cruz (81) no
dejaron en entredicho su rango y vencieron 15-8 al turco Mehmet
Topgakan y 15-10 al ruso Alexander Khotyantsev, tras haber relegado
al bronce al inglés Luke Campbell, submonarca del orbe, y al armenio
Artur Khachtryan, en cada caso.
Mientras, Yosbany Veitía (49) y José Ángel Larduet (91) batieron
en sus respectivos duelos, por 12-6 y 23-15, a los anfitriones
Alexandar Alexandrov y Tervel Pulev, dos monarcas de la pasada
edición. Y Erislandy Savón (+91) lo tuvo incluso más fácil al
coronarse por no presentación sobre el georgiano Milutin Bakhtidze.
De modo que fue "un buen comienzo", como certificó el entrenador
principal del equipo, Rolando Acebal, al colega Roberto Ramírez del
semanario Jit en la sede: "Los muchachos pelearon bien para la etapa
de trabajo que transitamos e irán mejorando en lo adelante".
Si no hubo más, de hecho, fue porque Robeisy Ramírez (52) debió
conformarse con un bronce, al retirarse en el asalto intermedio de
su pelea ante el local Stefean Ivanov, por molestias en el hombro
derecho, luego de que Yasnier Toledo y Roniel Iglesias —también
lastimado— acabaran sin presea en los 64 kg, al igual que Arisnoidys
Despaigne (69) y Emilio Correa (75). Aunque todos ellos tendrán la
posibilidad de desquitarse próximamente en el Grand Prix de Usti Nad
Labem (República Checa), del 21 al 24 de marzo.