Aún así, la práctica confirma que el desempeño de esas unidades 
			no llena las expectativas populares, sobre todo en lo que respecta a 
			precios y disponibilidad de algunos surtidos.
			"El más notorio es el acero —explica Odalys Marchán Hervas, 
			subdirectora de Comercio en la provincia— por la alta demanda que 
			tiene y por los discretos volúmenes que recibe el territorio. Pero a 
			veces también escasean otros materiales como el bloque, los áridos y 
			los elementos de piso."
			En algunos casos, según opinan especialistas del sector, es 
			insuficiente la infraestructura productiva local para asegurar los 
			volúmenes necesarios, aun cuando la respuesta tiende a mejorar.
			Esa puede ser una de las razones que ha perjudicado los niveles 
			de venta y satisfacción de necesidades de quienes concurren a 
			realizar compras.
			El primer semestre del año se vio marcado por imprevistos o 
			inestabilidad en determinadas producciones, dificultades en torno a 
			precios y otros detalles que no favorecieron la venta: un poco más 
			reanimada en la segunda mitad del año, al totalizar unos 20 millones 
			de pesos hasta ahora, distantes de lo que la provincia se propuso 
			(más del doble).
			La venta de arena, gravilla, bloques, cemento y otros surtidos 
			pudiera ser mucho más ágil, beneficiar a más personas y generar 
			ingresos superiores para el país, si quienes realizan esa ardua 
			tarea (braceros) tuvieran condiciones más propicias para ejercerla.
			El mercado de la calle Lico Cruz, en la cabecera provincial, por 
			ejemplo, es el más concurrido de todos. A diferencia de otras 
			tiendas y puntos, allí no hay serias dificultades para el acceso en 
			vehículo a la hora de realizar la compra y carga, aunque reducido, 
			el espacio interior es un poco más funcional, parece predominar buen 
			ánimo en los trabajadores... ; sin embargo, el carácter 
			eminentemente manual de todas las operaciones torna lento el 
			proceso.
			Algunos usuarios han expresado preocupación por las difíciles 
			condiciones en que laboran esos obreros en un lugar que, si bien ya 
			acumula casi dos años de actividad, carece de un baño, hay 
			dificultades para tomar agua, son insuficientes y de mala calidad 
			los guantes y botas de trabajo, y faltan caretas o nasobucos para 
			proteger las vías respiratorias.
			Recurrente molestia genera el asunto del transporte para 
			trasladar lo comprado. Entre las perspectivas está acercar más la 
			venta de materiales a los consejos populares con el fin de acortar 
			distancias. Así, deben entrar en red nuevas tiendas en el reparto La 
			Victoria (cabecera provincial) y en localidades como Vázquez, San 
			Manuel y Delicias.
			Aunque aspiraciones y resultados aún no coinciden totalmente, al 
			menos este 2011 ha sentado ciertas bases para una mejor etapa a 
			partir de enero. Claro, más que en informes e intervenciones, la 
			mejor confirmación de avance, a medida que transcurra el nuevo año, 
			debe estar en la satisfacción real por parte de quienes acuden a 
			esas tiendas para resolver o aliviar sus necesidades.