Siria proseguirá consolidando sus lazos de amistad y cooperación
con Cuba, país al cual admira por sus posturas de principio, firmeza
y solidaridad humana, afirmó el vicecanciller Faysal Mekdad.
En entrevista con Prensa Latina, el experimentado diplomático
recordó que Damasco y La Habana siempre han coordinado y apoyado
mutuamente en los foros internacionales, en particular en los
momentos más críticos.
Han sido nexos diplomáticos y políticos muy fluidos, de
entendimiento mutuo principalmente respecto a las causas justas,
señaló Mekdad.
Por sus posiciones firmes y claridad en la defensa de éstas y por
sus gestos humanitarios como el envío de médicos a sitios en
desastre, la colaboración en la salud y la educación con otros
países, y la prestación de programas asistenciales, se ha ganado el
respecto y la consideración de la comunidad internacional.
Ha compartido sus pocos recursos con otros igual o más
necesitados, y ha respaldado las causas justas, y por eso constituye
un ejemplo dentro y fuera de la Isla, y sentimos admiración por
Cuba, reiteró Mekdad.
El vicecanciller se refirió a que jóvenes sirios han estudiado en
Cuba, y varios de ellos completaron doctorados en sus respectivas
esferas.
De hecho, respecto a los especialistas sirios graduados en
universidades cubanas con quienes Prensa Latina ha tenido contacto,
todos ocupan hoy puestos relevantes en cada una de sus profesiones.
Mekdad recordó la satisfactoria visita que realizó el presidente
Bashar al-Assad a Cuba en 2010, en la que se discutieron
posibilidades de incrementar la cooperación económica y en otros
campo como la salud, en particular el interés en la adquisición por
Damasco de productos de la industria biotecnológica.
En esa ocasión, al-Assad también visitó Brasil, Argentina y
Venezuela.
Tenemos excelentes nexos políticos al más alto nivel, pero
debemos trabajar para ampliar los económicos, señaló.
Cuba se ha opuesto a las maniobras de los centros occidentales de
poder en los foros internacionales destinadas a azuzar la actual
campaña anti-siria, como su reciente rechazo junto a Rusia, China y
Ecuador a una resolución de condena contra Damasco en el Consejo de
Derechos Humanos de la ONU, con sede en Ginebra.
Igualmente, el pasado octubre el canciller cubano, Bruno
Rodríguez, viajó a la capital siria como parte de una delegación
ministerial de los países de la Alianza Bolivariana para Nuestra
América (ALBA) para patentizar el rechazo a la intervención
extranjera.