La selección de talentos para fortalecer la ofensiva del equipo
Los Cazadores, que representará a Artemisa en la edición 51 de la
Serie Nacional de Béisbol, es prioridad de la Comisión Provincial de
esta disciplina.
Esteban Lombillo, exdirector de Los Vaqueros de La Habana, ahora
al frente del naciente plantel, declaró a la AIN que trabajan en
busca de una línea central, tras valorar actuaciones de los 11
conjuntos en el campeonato del territorio.
Lombillo aseguró que la receptoría es otra incógnita en Los
Cazadores, pero destacó las posibilidades de jugadores, como Lázaro
Hernández, de Candelaria, y Dariel Crespo, de San Cristóbal,
prospectos que asegurarán lauros a la novena.
El pitcheo no es preocupación -según el futuro manager-, por
contar con figuras de primer nivel, entre ellos Miguel Alfredo
González, Yadier Pedroso, Jonder Martínez, Yuliesky González y
Miguel Lahera.
También resaltó la calidad de otros establecidos en clásicos
nacionales, como José Ángel García, Israel Sánchez y Gerardo
Miranda, y refirió entre las fortalezas la formación y desarrollo de
talentos en la Escuela de Iniciación Deportiva Escolar Antonio
Maceo.
El estadio 26 de Julio, cuartel general de Los Cazadores, se
encuentra en restauración capital para mejorar las condiciones y
convertirlo en un Complejo Deportivo, explicó Roberto Hernández,
director de la Empresa de Proyectos y Obras de Transporte.
Los trabajadores de la entidad montarán luces y una nueva
pizarra, que ofrecerá mayor visibilidad, precisó.
Asimismo, laboran en el levantamiento y drenaje del terreno,
mejoran las cabinas de transmisión para radio y televisión, y prevén
cambios en la estructura metálica de las torres, entre otros objetos
de obra, amplió el directivo.
El traje de los peloteros locales para la próxima fiesta
beisbolera tendrá los colores de la bandera cubana y su logotipo
será una cazadora con un arco rojo, que evoca a la diosa Artemisa,
según la mitología griega, explicó Jorge Luis Véliz, uno de los
diseñadores.
Añadió Véliz que representan en el emblema la planta de igual
nombre que la provincia -la cual abundaba en este territorio- y
resaltan el color de la sangre, por el sobrenombre de la capital del
territorio: Villa Roja.