Los desplazados en la región petrolera sudanesa de Abyei
ascienden a 112 mil 800 y su situación puede agravarse con el
incremento de las tensiones, según la Oficina de Asuntos
Humanitarios de la ONU (OCHA).
El pasado día 15 hubo enfrentamientos entre el ejército y los
ex-rebeldes del Movimiento de Liberación de Sudán (MPLS) cerca de
Banton Bridge, que causaron una decena de heridos, informó hoy la
portavoz de la OCHA, Elizabeth Byrs, reporta Prensa Latina.
La tensión persiste pese a que el presidente sudanés, Omar Hassán
al Bashir, y el jefe de la región autónoma del Sur de Sudán, Salva
Kir, acordaron la desmilitarización de la zona, supervisada por
tropas etíopes.
La Organización Internacional de las Migraciones (IOM) y la
Comisión para la Rehabilitación de Sudán del Sur (Ssrrc) monitorean
los movimientos de población y ya registraron 90 mil 400
desplazados, la mayoría en el condado de Twic, en la región de
Warrab.
De acuerdo con una misión de seguridad alimentaria y subsistencia
que visitó la zona, la situación de los ciudadanos que se movieron
hacia otros territorios para evitar ser víctimas de los combates es
muy compleja y su seguridad frágil.
El equipo constató que "los precios de los alimentos básicos como
el sorgo se encarecieron en 40 por ciento debido a la falta de
suministro".
Según la OCHA, "la petición inicial de fondos para Sudán de mil
700 millones de dólares sólo ha sido cubierta en el 43 por ciento,
es decir, con 731 millones".