El representante a la Cámara por el opositor Polo Democrático
Alternativo Iván Cepeda pidió al presidente colombiano, Juan Manuel
Santos, que ordene el retiro de cinco cuestionados embajadores de su
país.
En una carta abierta dirigida al jefe de Estado, divulgada hoy,
Cepeda sostuvo que el servicio diplomático exige una óptima calidad
personal.
El congresista advirtió que los cincos diplomáticos en cuestión
son objeto de delicadas investigaciones penales, algunas
relacionadas con delitos internacionales, o presentan inquietantes
antecedentes penales o disciplinarios.
Estos son los embajadores de Colombia en Perú, Jorge Visbal;
República Dominicana, Mario Montoya; el Vaticano, César Mauricio
Velásquez; Honduras, Francisco Canossa, y ante la OEA, Luis Alfonso
Hoyos.
Según explicó el legislador, Visbal afronta un proceso en la
Fiscalía General de la Nación por sus posibles nexos con jefes
paramilitares.
De Montoya, general en retiro del Ejército, indicó que éste es
objeto de seis investigaciones en la Unidad Nacional de Fiscalía
Delegada Ante la Corte Suprema de Justicia.
A su vez apuntó que Velásquez es investigado por el sonado caso
de los seguimientos e interceptaciones ilegales de la policía
secreta a magistrados, políticos y periodistas.
Mientras que Canossa y Hoyos fueron despojados de su investidura
como parlamentarios colombianos por el Consejo de Estado, por faltas
gravísimas a sus deberes como congresistas.
La sanción que ambos recibieron, acotó, en Colombia es
equivalente a la llamada muerte política o inhabilitación para
volver a ser elegidos.
A mi juicio, no resulta ético ni presentable que en el contexto
internacional sea convertida en el nacimiento a la vida diplomática,
agregó.