Un
riguroso programa de conciertos ha preparado el Berklee College of
Music de Boston para su segundo periplo por la isla donde
participarán en la Feria Internacional Cubadisco 2011, y celebrarán
los 50 años de la obra Música para danza, del maestro Juan
Blanco (1919-2008), pionero del movimiento de la música
electroacústica en Cuba y Latinoamérica.
El grupo de estudiantes de Berklee, encabezados por los
vicepresidentes de esa prestigiosa institución estadounidense, tiene
previsto ofrecer varios conciertos en su nueva visita: el domingo 15
de mayo, a las 11:00 a.m., en la sala Dolores, de Santiago de Cuba;
el martes 17, a las 3:30 p.m., en el Instituto Superior de Arte
(ISA), y el viernes 20, a las 7:00 p.m., en el teatro del Museo
Nacional de Bellas Artes, entre otros, según dijo a Granma el
profesor y saxofonista Neil Leonard, promotor de este proyecto de
intercambio cultural.
Profesor de composición, programación y performances con video,
Leonard explicó que el programa girará en torno a la temática
Música y movimiento, e incluye presentaciones en el Teatro
Nacional, el miércoles 18, a las 11:00 a.m., junto a Danza
Contemporánea, y ese mismo día a las 8:00 p.m. en Casa de las
Américas donde compartirán escenario con Los Hermanos Arango.
El pasado mes de noviembre, Leonard impulsó el primer concierto
de estudiantes y egresados de la academia de Berklee en la isla, en
conjunto con el Laboratorio Nacional de Música Electroacústica (LNME).
En esa ocasión, los músicos estadounidenses y cubanos interpretaron
un variado repertorio de canciones entrelazadas con imaginación y
ánimo experimental, que tocó el techo creativo con el estreno de la
obra Nuestro tiempo, compuesta en honor a Juan Blanco por
Leonard y los estudiantes de ambos países.
"Para los alumnos tuvo un alto valor elaborar una pieza en
conjunto, dado que brindó la posibilidad de colaborar y compartir
ideas. La recepción fue óptima y permitió compartir los intereses en
común que tenemos respecto a la educación y al intercambio musical",
señala.
A lo largo de la década del 80, Leonard participó en varias
ediciones de los Festivales Internacionales de Música
Electroacústica de Varadero, que organizaba el autor de Suite
Erótica. "Juan Blanco fue un mentor para mí. Cuando yo empecé
en la música electroacústica me interesó mucho su sentido artístico
de riesgo. Era muy estimulante la forma en que asumía la creación.
La experiencia de conocerlo y contar con su ayuda fue una parte
inseparable de mi vida artística", recuerda.
Desde entonces, el compositor estadounidense ha mantenido una
estrecha relación con el acontecer cultural cubano y especialmente
con el LNME, institución que ha dado abrigo a un importante núcleo
de Djs de la fértil escena de la música electrónica hecha en casa.
"En el mundo se conoce que la isla es la cuna de grandes músicos
populares, pero uno de mis objetivos fundamentales es presentar a
Cuba el mundo académico y artístico de Estados Unidos desde una
visión más amplia, en este caso como un país con una historia de la
música electrónica muy importante".
"Luego del primer encuentro —apunta— hay más interés por el
proyecto, tanto en Cuba como en Boston. Incluso, después de los
conciertos de mayo queremos organizar una tercera visita antes de
terminar el año".
Leonard disfruta este intercambio con la satisfacción de quien ve
cómo un sueño se transforma en realidad. "Yo crecí como jazzista y
el jazz y la música popular en EE.UU. no se pueden entender sin
conocer la música cubana. En Cuba aprendí mucho y siempre tuve el
sueño de venir con un grupo de estudiantes. Y poco a poco ya lo he
ido cumpliendo".