De la planta al sorbo
Germán Veloz
Placencia
¿Podrá HOLGUÍN lograr dentro de 4 años una cosecha de 2 500
toneladas de café y estabilizarla en lo
sucesivo? ¿Saben aquí lo que significa
para el país dejar de gastar en el 2011 los 47 millones de dólares
anuales utilizados hasta ahora para importar el café correspondiente
al consumo interno normado?
Los
consejos de Rolando Caballero son útiles para los viejos cafetaleros
y los que se han incorporado recientemente.
Raciel Aguilera Pérez, subdelegado de la Agricultura al frente de
las labores del café, estima que es correcta la ruta diseñada.
"Creceremos en 1 189 hectáreas. En los municipios de Sagua, Frank
País y Moa lo haremos principalmente con la variedad Robusta,
resistente y de altos rendimientos. En el territorio de Mayarí, en
el polo de Pinares, donde la altura favorece la producción de un
grano con alto valor para el comercio exterior, continuaremos
fomentando el Arábigo en áreas con sombra adecuada".
"Este año impulsamos la creación de viveros grandes en Cueto,
Mayarí y Sagua, al mismo tiempo que las granjas y cooperativas han
hecho los propios. Nos permitirá el año próximo sobrepasar las 600
hectáreas, la mayoría de ellas por concepto de renovación.
"En el 2012 también serán más de 600, pero entonces las siembras
nuevas andarán próximas al 50% de esa cifra, resultado de la
incorporación de productores que retomaron la actividad cafetalera y
de los 262 que recibieron tierras por el Decreto-Ley 259".
Los planes comprenden el crecimiento de patios secaderos y la
reparación de unos 4 000 metros cuadrados de los existentes.
INDICIOS DE BUENOS PASOS
A Armando Correa Reyes, administrador de la Granja Diosdado Samón,
en Farallones de Moa, los hechos le dicen que apostar por la
variedad Robusta resulta acertado. "Tiene muchas ventajas. Lleva
menos sombra, aunque hay que manejarlo para que no crezca en exceso,
lo que dificultaría la recolección. No se gotea prácticamente cuando
madura. Y hay que tener en cuenta el rendimiento industrial, porque
puede dar 5,8 libras por lata y el Arábico unas 3,7".
La granja planifica plantar 27 hectáreas el año próximo: diez en
el sector estatal y 17 en el cooperativo-campesino. "Los precios
actuales del café estimulan a los campesinos. Allí tenemos 17
parceleros que no entregaban la producción de sus patios, alegando
que era autoabastecimiento; sin embargo, en esta cosecha cambiaron
de opinión. Otros 19 solicitaron sembrar café en áreas nuevas".
En el asentamiento de Naranjo Agrio está la despulpadora
ecológica administrada por Yulia Pérez, quien habla igualmente con
agrado de las ventas de café realizadas al centro por personas no
incluidas en los planes. "Los productores sienten satisfacción por
lo rápido que cobran los cheques en el Banco", agrega.
Para convencerse del creciente ánimo de los productores, basta
llegar hasta el pintoresco sitio conocido como El Guárano, donde
Rolando Caballero Cuba tiene en usufructo algo más de cuatro
hectáreas. "Trabajo con mis dos hijos y estamos saliendo bien en
cuanto al aumento de los precios.
Rolando también es ejemplo en el manejo de sus áreas. "Terminé la
rehabilitación de mis matas para que duren en producción siete u
ocho años más. Siembro posturas en los espacios vacíos, regulo
sistemáticamente la sombra y no descuido la protección del suelo.
SAGUA DECIDE
El municipio de Sagua de Tánamo es el mayor productor del grano
en la provincia. De acuerdo con el director de la Empresa Cafetalera
del territorio, ingeniero agrónomo Abel Sánchez Perdomo, el 73% de
las fuerzas corresponde al sector cooperativo-campesino, "que sin
duda alguna vive un despegue".
No obstante, cree que el programa de recuperación que apunta al
2015 no solo depende de las siembras y de los precios. "Tiene que
estar montado sobre una base lógica de abastecimientos
técnico-materiales".
Asevera que de acuerdo con la situación de su territorio (tiene
25 despulpadoras) se debe potenciar la capacidad de las acciones de
beneficio del grano, esencialmente de más áreas para el secado,
tanto de forma natural como artificial. "La necesidad sugiere
aumentar en cinco secadoras rotatorias y en tres silosecadores",
refiere.
"No se puede dejar a un lado el llamado paquete tecnológico, que
contiene los fertilizantes químicos que ayudan a reponer las plantas
después de las cosechas. También debemos insistir en su uso
racional, porque cuestan mucho dinero".
Estima que aun cuando esos productos industriales aparecieran
regularmente en los campos, debe aumentar y convertirse en cotidiana
la preparación de compost, abono verde a partir de la canavalia
(variedad de leguminosa), así como del humus de lombriz, mediante la
pulpa del café y el excremento del ganado vacuno en cría, según la
carga recomendada para las montañas.
No es un camino fácil de recorrer para Holguín y el resto de las
provincias comprometidas con cambiar el panorama cafetalero del
país. |