Miles de uruguayos vencieron el sueño en la madrugada de este
martes y contemplaron, congregados en planetarios, calles y azoteas,
el último eclipse lunar del año, coincidente con el solsticio de
verano en el hemisferio sur.
El fenómeno astronómico pudo apreciarse de forma total en todo el
país antes del amanecer, aunque movimientos inusuales se apreciaban
en las viviendas capitalinas desde tempranas horas de la madrugada,
cuando comenzó el eclipse, reporta Prensa Latina.
En varias regiones de la nación, los uruguayos se congregaron en
sitios especialmente preparados con telescopios para observar la
superficie lunar mientras era ocultada por la sombra de la Tierra.
Astrólogos, científicos, curiosos y enamorados confluyeron en
varios parques de la capital para ser testigos de un suceso que no
se repetirá hasta el próximo junio, algunos para estudiar el
fenómeno, sacar predicciones o besarse cuando la Luna se teñía
completamente color ocre.
El momento más esperado, la totalidad del eclipse, duró cerca de
una hora y pudo apreciarse con claridad en el despejado cielo de
esta capital.
El evento astronómico, el último de este tipo en la década,
coincidió también con el día más largo del año en el hemisferio sur,
el solsticio de verano, por lo que la noche más corta aquí fue
también la más oscura durante un plenilunio.
La totalidad del eclipse se apreció en todo el Océano Pacífico,
América del Norte, América Central y el noroeste de América del Sur,
mientras desde el oeste de Europa y África sólo se vio el comienzo
del fenómeno.
Este tipo de eventos ocurre cuando la Tierra se interpone entre
el Sol y la Luna y la sombra del planeta cubre al satélite hasta
taparlo por completo.