Ni
los ecos de la gira que acaba de hacer con su orquesta por Estados
Unidos de costa a costa, ni el entusiasmo con que asumirá en
septiembre una exclusiva presentación en Perú junto a Los Van Van,
suplantan en el espíritu de Elito Revé la orientación que lo lleva a
poner el oído en su tierra.
"Quien no esté atento a lo que sucede aquí, ahora y siempre,
pierde frescura y sintonía. Por lo menos en mi caso, para que el
changüí y la timba se den la mano en el Charangón, hay que tener la
raíz bien afincada en nuestra Cuba. De ahí que buena parte del
trabajo lo dediquemos a tocar a lo largo y ancho del país, porque
nos debemos a todos los cubanos", explica el líder de una de las
agrupaciones más explosivas y rotundas de la música popular bailable
actual.
Como para corroborar lo que dice el joven maestro, Juan Miguel
Vera Núñez, promotor de la orquesta, muestra el itinerario de la
intensa programación de agosto. Muchas horas en la carretera; días
de doblar presentaciones. Acaban de venir de Chambas y se preparan
para estar el sábado 21 y el domingo 22 en el Cotorro y Guanabacoa.
Un ligero respiro, y el 27 en Manzanillo.
Antes de la breve batería de preguntas y respuestas, intercambio
información. Le enseño a Elito una comunicación enviada por David
Figueroa, DJ Melao, uno de los pinchadiscos más sobresalientes en el
ámbito latino de Norteamérica:
¡Pum Pum! ¡Chan Chan! La escuela de la Revé sigue ahí 54 años
después. El éxito de la Revé esta presente en su sonoridad
particular, la cual exige movimiento y expresión al bailador. En
esta ultima gira por los Estados Unidos, la Revé demostró que la
fórmula de Papá Changüí, Elio Revé, todavía funciona. El
puertorriqueño Tito Puente una vez dijo que "en cuanto las orquestas
cubanas empiecen a venir a los Estados Unidos, tendremos que
regresar a la escuela". Y llegó la institución de la música cubana
al mercado norteamericano y se llama Elito Revé y su Charangón. ¡La
evolución de la música salsa comienza ahora! La Revé plantó bandera
y le demostró al mundo que el changüí está presente en Cuba.
¿Se cumplieron las expectativas de la gira por Estados Unidos?
"Teníamos una historia en ese país. Mi padre era muy respetado
por varios sectores del público. De alguna manera, pese a
dificultades y restricciones, siguieron escuchando nuestros temas.
Pero, a decir verdad, no imaginé que nos recibieran tan
cálidamente".
Si tuvieras que fijar dos momentos de la gira, ¿cuál escogerías?
"Me pones en una situación difícil, pues cada concierto tuvo algo
especial. Sin embargo, no puedo negar que la sorpresa mayor provino
de la gente que en San Francisco nos pedía y coreaba temas que no
sospechábamos de su conocimiento, mientras que el mayor desafío fue
prolongar por unas tres horas la presentación en SOB’s, algo así
como la catedral de la salsa en Nueva York".
¿Alguna buena noticia al regresar a casa?
"La pegada del tema Mi amiga Chichí. Está en la radio, en
las discotecas, en la playa. Hubo otras dos que te comentaré luego".
¿A qué atribuyes el éxito?
"Ante todo debo agradecer que uno de los integrantes del
Charangón, Dagoberto Vázquez, dedique al colectivo los frutos de su
inspiración. En este caso, como en otros muchos de la música popular
cubana, los motivos están a la vuelta de la esquina. Cuenta
Dagoberto que un día, de paso por Centro Habana, observó a una
muchacha que pedía botella. Pero cuando pasaba un Lada o un
almendrón, volvía la cara, hasta que aparecieron los Toyota y los
Mitsubichi. La música bailable, desde los más remotos sones, no ha
dejado de ser crónica de costumbres con toques críticos".
¿Estará el tema en tu próxima entrega discográfica?
"No faltaba más. El álbum que pronto Bis Music pondrá en
circulación se llama De qué estamos hablando, que es otro
tema muy escuchado por estos días".
¿Solo confías en lo que pega más rápido?
"No. En que un número pegue o no influyen muchos factores. Yo
apuesto por igual por todos los temas que conforman un disco. En
esta producción, por ejemplo, me interesaría mucho que se fijaran en
una elegía festiva dedicada a mi padre por Andy Fornet y Changüí
tradicional, en el que colaboraron, para suerte nuestra, el maestro
Chucho Valdés, ese tremendo tresero que es Pancho Amat y los pilares
del Changüí Guantánamo. En el álbum también debe valorarse cuánto
aportaron a otros temas Pachi Naranjo, director de la Original de
Manzanillo, y Manuel Mirabal, El Guajiro, trompetista del Buena
Vista Social Club".
¿Y cuáles son las noticias que nos querías comentar?
"La reapertura del Salón Rosado Beny Moré, y el encuentro que
tendremos con Los Van Van en Perú. Con la instalación de La Tropical
remozada por ARTEX, se debe recuperar el empuje de la principal
pista de baile del país. En cuanto a lo de Perú, es enorme la
propaganda que allá se ha hecho para los conciertos que ofreceremos
junto a la gran banda de Juan Formell los días 17 y 18 de
septiembre, este último en un estadio. No hay que olvidar que
Formell también estuvo en la Revé".