Mientras más añejo, mejor, y así se lo hizo saber a sus rivales
el doble bronceado de Goyang, Sudcorea, con arranque de 116 kg,
envión de 151 y total de 267, siete kilogramos menos que el
conseguido en la nación asiática. A sus espaldas, el colombiano
Carlos Berna y el mexicano Lino Montes, quienes nada pudieron hacer
ante la hegemonía regional de Sergito, respetado, además, entre la
elite del orbe por su condición de doble monarca universal en Santo
Domingo’06 y Chiang Mai’07.
También en el inicio, la azteca Carolina Valencia ganó los 48
kilogramos, superando a la puertorriqueña Carmen Echevarría y la
dominicana Guillermina Candelario, en tanto la colombiana Rusmeri
Villar reinó en los 53, escoltada en el podio por la venezolana
Inmara Henríquez y la boricua Lesli Burgos.
Este XXI Panamericano reúne a 239 halteristas de 24 países, y es
punteable hacia Guadalajara’11, sumando su rendimiento de ahora con
el de la edición precedente de Chicago, en la que los antillanos
arrasaron con 16 medallas de oro, cinco de plata y una de bronce.
Desde ya, Álvarez está totalmente enfocado en el Campeonato
Mundial de septiembre, en Antalya, Turquía, y una presea bajo los
cinco aros, esquiva para Cuba desde Atlanta’96 y con la que podría
poner punto final a su exitosa carrera entre forzudos.