WASHINGTON,
6 de mayo.— Las posibilidades de frenar el vertido de petróleo en el
Golfo de México están puestas en una campana de metal y concreto que
técnicos de la British Petroleum (BP) intentan colocar en el área de
desastre.
La maniobra nunca antes se ejecutó en suelo marino, por lo que
los expertos se muestran escépticos de los resultados, asegura CNN.
Al respecto, el responsable de las operaciones de BP, Doug Suttles,
precisó que el proceso es muy complejo y "podrían producirse
problemas en el transcurso" de la operación.
La armazón de 100 toneladas de peso cubriría el área por donde
drena el pozo petrolero, y desde ella debe succionar el crudo para
evitar que siga aumentando la mancha, cada vez más cerca a la costa
de Louisiana.
Los técnicos de la BP hacen esfuerzos para contener el desastre y
el aumento de las pérdidas ocasionadas por el hundimiento de la
plataforma Deepwater Horizon el 22 de abril último, recordó PL.
La marea negra está cerca de las islas Chandeleur y de la boca
del río Mississippi, en el sureste de Louisiana.