WASHINGTON, 26 de abril.— Las perspectivas son sombrías en el Golfo
de México, después de que, tras hundirse una plataforma petrolera
cerca de la costa de Louisiana, Estados Unidos, hayan fracasado
varios intentos de impedir el vertido de crudo, señala DPA.
Desde el domingo, los expertos de la plataforma Deepwater Horizon
intentan sin éxito sellar las salidas, y se estima que unos 1 000
barriles de petróleo diarios se están derramando cerca de la costa,
según el diario Houston Chronicle.
Una superficie marina de unos 1 500 kilómetros cuadrados se
encontraba este lunes cubierta de una fina capa de crudo frente a la
costa norteamericana. La contralmirante de la guardia costera Mary
Landry aseguró que ya se ha advertido de los peligros que se
avecinan a los estados ribereños como Florida y Alabama. Los
defensores del medio ambiente temen una grave afectación al
ecosistema de la zona.
Doug Suttles, el principal responsable a cargo de las tareas para
evitar un derrame, apuntó que "la acción es muy compleja y
posiblemente no tenga éxito".
La petrolera se incendió el pasado martes, luego de una fuerte
explosión, y dos días después se hundió.