La visita a Bolivia que realiza la presidenta de Argentina,
Cristina Fernández, estará marcada por la firma de un contrato
gasífero y la revalorización histórica de la heroína independentista
Juana Azurduy, reporta Prensa Latina.
El principal objetivo del viaje es la firma de la agenda al
contrato de compra y venta de gas que establecerá garantías mutuas
para avanzar en los proyectos y elevar el envío boliviano hasta los
27,7 millones de metros cúbicos diarios en 2017.
La visitante llegará a esta ciudad con sus ministros de
Exteriores, Jorge Taiana, y de Planificación, Julio de Vido, y se
dirigirá a la Casa de la Libertad, donde sesionará la Asamblea
Legislativa de manera solemne.
Miles de estudiantes de todos los niveles formarán una cadena
humana con pañuelos blancos que se extenderá desde el aeropuerto de
la capital hasta la Casa.
Además se dispondrá el horario continuo para permitir a la
población asistir a los actos dispuestos para esta ocasión en
homenaje a la heroína de la independencia, Juana Azurduy de Padilla,
el otro punto importante de la visita.
Durante su estancia, la visitante impondrá el grado póstumo de
generala del Ejército argentino a la patriota boliviana, quien
comandó una columna guerrillera contra la corona española a las
órdenes de Buenos Aires.
Además, Fernández entregará el Sable de la Generala a Morales, y
éste retribuirá con el Collar con la Moneda del Sol acuñada en 1813
en la Casa de la Moneda de Potosí para el Ejército de las Provincias
Unidas del Río de la Plata.
También está previsto que ambos presidentes firmen un acuerdo
para instituir el 12 de julio, fecha del natalicio de la heroína,
como Día de la Confraternidad Boliviano-Argentina.