Sobre la terapia floral trata la exposición inaugurada en la
Galería L, en esta capital, que muestra 39 pinturas de Crispín Sarrá
en colaboración con Lídice Verdecia, especialista en medicina
natural y tradicional.
Fernando Torres, director de la instalación, destacó la temática
que reflejan las obras, dirigidas a influir en la paz interior de
los niños y sus padres, sistema de curación natural descubierto por
el británico Edward Bach.
Verdecia, en el catálogo de la muestra, reitera el valor de las
esencias propuestas por el galeno, que, desde principios del siglo
XX, han servido para prevenir y curar a numerosas personas del
miedo, la ira, las depresiones y las adicciones.
Bach consideraba que, si existe paz interior, se puede combatir
la raíz de las enfermedades utilizando los propios medios de
curación del cuerpo.
El investigador descubrió que las flores llevan a esa paz,
mediante un cambio mental y energético que influye sobre la
enfermedad para modificarla.
En un mundo como el nuestro, casi condenado a morir, es necesario
que todos pensemos en hacer algo útil a diario para salvarlo, afirma
Verdecia sobre este producto natural e inocuo, que califica de arma
de amor.
Edward Bach nació el 24 de septiembre de 1886 en Inglaterra, pero
su familia provenía de Gales, de donde heredó el amor, sensibilidad
e interés por la Naturaleza.
El sistema floral de Bach está compuesto por 38 esencias, cada
una de ellas actúa en emociones diferentes, como el miedo, la
inseguridad, la angustia o la desesperación.