Desde
1996 cada 13 de noviembre, nuestro país celebra el Día del Bombero
Cubano. Es esta una fecha de homenaje multiplicado para estos
hombres, distinguidos siempre por brindar un servicio profesional
con rapidez, oportunidad y racionalidad en el uso de los recursos
exigidos por las circunstancias.
Más de 20 000 servicios ha brindado en este año el Cuerpo de
Bomberos de Cuba. De ellos más de 11 000 corresponden a incendios en
los que ha sido necesaria su participación para poder sofocarlos,
asegura el teniente coronel Raúl Orta, jefe del órgano de dirección
del Cuerpo de Bomberos de Cuba.
El 60,6% de los incendios tiene lugar en áreas yermas, principal
escenario para la ocurrencia de estos accidentes, fundamentalmente
entre los meses de febrero y mayo. En el presente año se reportan,
además, 1 465 incendios en viviendas, cifra que disminuye con
relación a igual periodo del año anterior.
Los siniestros en los inmuebles ocurren mayoritariamente por el
deficiente aislamiento de los conductores eléctricos y la sobrecarga
en las líneas; también sobresalen las inflamaciones de cocinas por
falta de atención y negligencia de muchos moradores, aunque en la
ciudad de La Habana tiene una elevada incidencia el mal estado en
que se encuentran las líneas de gas manufacturado.
"Sin embargo, para que el trabajo preventivo realmente funcione,
debemos involucrar a la población de forma general en nuestras
actividades, pues con su cooperación sistemática, pueden evitarse
daños considerables", afirma el coronel Mario Álvarez, nuevo jefe
del Cuerpo de Bomberos de Cuba.
Y señala: "La existencia de comandos de extinción de incendios en
todos los territorios del país posibilita mantener la eficiencia y
profesionalidad de nuestros bomberos lo mismo en tareas de
prevención, que en los servicios de extinción, salvamento y
rescate".