. — Fiscales federales
solicitaron la confiscación de activos e instalaciones valoradas en
500 millones de dólares de una fundación benéfica por presuntos
vínculos con Irán, anunciaron hoy medios de prensa.
Según la televisora CNN, se trata de cuatro mezquitas y un
rascacielos de Nueva York que pertenecen a la fundación sin fines de
lucro Alavi.
De aprobarse, será una de las confiscaciones de propiedad más
grandes en nombre de la lucha antiterrorista en la historia de
Estados Unidos.
No obstante, la incautación de las mezquitas podría generar
problemas legales en torno al derecho a la libertad religiosa
consagrado en la Primera Enmienda de la Constitución.
Aunque anunció su disposición de negociar, el gobierno de Barack
Obama mantiene una línea similar a la de su predecesor George W.
Bush de aplicar sanciones a la nación del Golfo Pérsico.
El diario The New York Times reveló recientemente que la Casa
Blanca estudia nuevas medidas diplomáticas y económicas contra Irán,
en especial en materia petrolera y restricciones a bancos de esa
nación.
Washington acusa a ese país de desarrollar armas de destrucción
masiva, lo cual es rechazado por las autoridades persas, que
defienden el plan para obtener energía eléctrica.
La comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de
Representantes aprobó el pasado mes un proyecto de ley que sanciona
a las compañías petroleras que vendan combustible a Irán.
Aunque posee una de las principales reservas de petróleo y gas
del mundo, esa nación carece de capacidad de refinación, por lo cual
importa gran parte de la gasolina que consume y productos derivados.
Con anterioridad la cámara baja otorgó luz verde a una iniciativa
que autoriza a los estados y gobiernos locales norteamericanos a no
realizar inversiones en Irán.