.— Miles de venezolanos
marcharán hoy contra las bases militares de Estados Unidos en la
vecina Colombia ante un llamado del Partido Socialista Unido de
Venezuela (PSUV).
El coordinador nacional de organización del PSUV, Jorge
Rodríguez, declaró a periodistas que la invitación a la marcha
incluye a todas las mujeres y hombres de bien que habitan en el
país.
De acuerdo con Rodríguez, es una movilización en defensa de
Venezuela, de la patria, de la soberanía y sobre todo de la paz.
En declaraciones a Prensa Latina, el coordinador de movilización
y eventos del PSUV en Caracas, Carlos Sierra, pronosticó que esperan
la participación de unos 10 mil venezolanos en Caracas y unos 100
mil en todo el país.
Subrayó que la intención es hacer un llamado al pueblo hermano
colombiano para rechazar la injerencia norteamericana en la nación
vecina.
Nosotros estamos rodilla en tierra apoyando el llamado del
presidente Hugo Chávez el domingo último a la defensa de nuestro
país, porque nosotros como venezolanos y jóvenes no permitiremos que
ningún gobierno extranjero invada nuestra soberanía, aseveró.
Por su parte, Rosaida Hernández, del buró político del PSUV en
esta capital, manifestó que las bases norteamericanas en Colombia
son una amenaza muy grande para la paz en América Latina.
Durante el Aló presidente del domingo último, Chávez puntualizó
que pese a la amenaza imperial y a sus lacayos en el continente,
como el gobierno colombiano, Venezuela seguirá transitando la
Revolución socialista.
Lo que ha pasado ahora entre Colombia y Estados Unidos es la
entrega de un país, el gobierno colombiano ha convertido a esa
nación hermana en una colonia yanqui, reiteró.
A su juicio, Colombia ha sido anexada a Estados Unidos y no hay
precedentes de la entrega de un país, pero algún día esa nación hija
del Libertador Simón Bolívar será libre de nuevo.
Bogotá y Washington firmaron el pasado 30 de octubre el acuerdo
que le permite a Estados Unidos la instalación de siete bases
militares en suelo neogranadino.
Según el documento suscrito, se autoriza la presencia en el país
vecino de al menos 800 militares estadounidenses y 600 civiles
contratistas de la administración de la potencia norteña que tendrán
inmunidad y no se subordinarán a las leyes colombianas.