GINEBRA,
12 de noviembre.— Unos 200 millones de niños menores de cinco años,
principalmente de países en desarrollo, presentan retraso en el
crecimiento como resultado de la desnutrición materna e infantil
crónicas, manifestó en un comunicado Ann Veneran, directora
ejecutiva del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia
(UNICEF), según EFE.
En el reporte presentado por la organización "Seguimiento de los
progresos en la nutrición de los niños y las madres", Veneran
destacó que "la desnutrición roba la vitalidad del niño y hace que
una serie de enfermedades contra las que el organismo podría
defenderse en circunstancias normales, sean mucho más peligrosas".
La funcionaria aseguró además que "más de un tercio de los niños
que mueren de neumonía, diarrea u otras enfermedades podrían
sobrevivir, si no sufrieran desnutrición", destaca AP.
Los datos publicados revelan que más de un 90% de los infantes
afectados viven en países de África y Asia, y fue contundente al
señalar que "quienes sobreviven a la desnutrición suelen tener
deficiencias físicas durante el resto de sus vidas". Con más de 1
000 millones de personas que padecen de desnutrición y hambre, "es
necesaria la urgente acción", se señala.