El coronel Andre Ndrianarijaona, al frente de las Fuerzas Armadas desde este miércoles, tiene bajo su mando los tanques ubicados en los cuarteles del Cuerpo de Servicios Administrativos y Técnicos del Ejército, a unos 15 kilómetros del palacio presidencial.

Aunque los militares amotinados niegan atacar la sede del jefe de Estado, Marc Ravalomanana, en Iavoloha, éste apeló a las personas residentes en esa ciudad capitalina para proteger al presidente y al palacio, publicó en un comunicado de su radio privada.

Un portavoz de los rebeldes, coronel Noel Rakotonandrasa, añadió que era una medida táctica preventiva y que los tanques estaban allí para interceptar una eventual ayuda de mercenarios convocados por Ravalomanana.

La crisis en esa isla del Océano Índico está en un punto clímax y las tensiones aumentan, los medios reportan de la inseguridad en la población malgache y los cambios constantes en las filas del Gobierno.

Un dato que reitera la prensa local es la solicitud de retirada del personal innecesario de la embajada de los Estados Unidos y de los residentes estadounidenses aquí.

La víspera, Benja Razafimahaleo, ministro de Finanzas y Presupuesto del gobierno de transición, nombrado por el líder opositor Andry Rajoelina el mes pasado, asumió el mando del Ministerio, sin reportes de violencia, según informó la prensa.

Por su parte, Ravalomanana instó a mantener la calma y pidió responsabilidad a las Fuerzas Armadas y de Seguridad para la lograr la estabilidad del país.