Un testimonio de cómo la mafia opera libremente es el film
italiano Gomorra, que se exhibe en el XXX Festival Internacional del
Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana.
Mateo Garrone, director de Gomorra, se basó en un trabajo bien
documentado, que recoge cinco de las 11 narraciones del libro
escrito por Roberto Saviano sobre el proceder interno de la Camorra
o mafia napolitana, organización surgida a principios del siglo XIX
y que en el XX prácticamente dominaba la sureña ciudad italiana.
En el largometraje Garrone se apoya en un trabajo de minuciosa
investigación, dirigido a mostrar la crudeza de esa realidad, sin
maniqueísmos, sólo la sordidez de su denuncia.
La película catalogada por el periódico The New York Times como
un filme poderoso, absorbente, conmovedor, maravillosamente actuado
y muy bien escrito, refiere la guerra entre mafias en el barrio
napolitano de Secondigliano, considerado uno de los lugares más
peligrosos de Europa, y en la industria textil de Tersigno.
Asimismo profundiza en el barrio dormitorio de Scampia, en el que
no hay tiendas, ni bares, ni transporte público, pero sí uno de los
mayores mercados de la droga al aire libre donde la policía no se
atreve a entrar.
Garrone refiere la historia de tres adolescentes, que podría ser
la de muchos otros tempranamente reclutados por la mafia, que el
director maneja como telón de fondo.
En este relato Gomorra trata de dar un carácter más argumental,
mostrando jóvenes tan peligrosos como inexpertos que van a planear
el desafío al poder de los capos, lógicamente, con fatales
consecuencias para ellos.
Uno de los principales méritos del film es el realismo con que
Garrone trata el tema de la mafia, pero realizado desde un punto de
vista humano, lo que consigue acercar al espectador a las víctimas
de este flagelo.
Garrone, director de otras películas como El embalsamador y Primo
amore, con Gomorra obtuvo este año los galardones en las categorías
de mejor película, director, actor, guión y dirección de fotografía,
que otorga la Academia de Cine Europeo, además del Gran Premio del
Jurado en el Festival Internacional de Cine de Cannes.