Bejarano retribuye a Camagüey
Virginia Alberdi Benítez
Es digno, saludable y grato volver a los orígenes. Agustín
Bejarano lo ha hecho. En Camagüey nació y dio sus pasos iniciales en
su formación. La primera exposición personal fue en 1979 en la
Galería de Arte Universal Alejo Carpentier, de esa ciudad. Allí, una
vez egresado del Instituto Superior de Arte, incentivó la práctica
del grabado.
Pero no eran tiempos propicios debido a las
dificultades materiales por las que atravesaba el país. Ahora el
artista ha vuelto a la carga en sus raíces: noviembre fue testigo de
la inauguración, bajo sus auspicios, de un nuevo taller de grabado,
mientras el público agradecía una muestra personal del artista, con
piezas de su serie Eclipses, en las que experimenta con
hemisferios cóncavos que filtran la luz hacia el espectador, y
prosigue en una perspectiva volumétrica sus inquietudes y obsesiones
estéticas.
El
público camagüeyano admira las piezas de Bejarano.
Sobre esta última, el poeta y ensayista Luis Álvarez escribió con
toda razón: "Bejarano conforma un universo que, en su calidad
técnica, siempre deslumbrante, pero sobre todo en su excepcional
visión de lo humano permanente, se levanta como extraordinaria
metáfora de la difícil existencia cotidiana". Fue una manera muy
sintética de precisar el rigor artístico y la vocación humanista del
creador.
Este ha sido un año intenso para Bejarano. A finales del verano
protagonizó, junto a su compañera Aziyadé Ruiz, la Primera Jornada
de la Cultura Cubana en Croacia. En Zagreb la crítica, más de una
vez, se refirió a sus logros artísticos. Luego montó su exposición
personal Mentes flotando, en Viena, acción organizada de
conjunto por la embajada de Cuba en Austria y el Instituto Cultural
Mexicano en esa capital europea.
Pero guardó para su Camagüey lo que considera su más importante
hecho artístico de la temporada. "Yo creo —comentó a Granma—
que los artistas de esa provincia, como lo han hecho con otras
manifestaciones de las artes plásticas, pueden aportar muchas
novedades al grabado". |