Un récord de producción implantaron los avicultores de Ciego de
Ávila durante el 2006 al recolectar más de 105 millones de huevos.
El esfuerzo realizado permitió sobrepasar en más de dos millones de
posturas lo previsto para el período, destacó Rogelio García, director
aquí de esta rama agrícola.
Indicó que el auge del territorio en este campo contribuyó además
al envío de altos volúmenes del vital alimento a otras provincias,
especialmente a la capital cubana.
Los hombres y mujeres dedicados al giro se distinguieron igualmente
al ahorrar unas 15 toneladas de pienso por cada millón de huevos
producidos, debido a la calidad del alimento seco.
La estabilidad del nutriente con los niveles de energía y de
proteína adecuados, garantiza los requerimientos del animal desde que
es polluelo hasta su adultez, razón por la cual las ponedoras
consumieron como promedio sólo 103 gramos cada día, siete por debajo
de lo planificado.
Tal eficiencia alcanzada obedeció además al buen manejo de las
aves, la higiene en las instalaciones y el trabajo fitosanitario.
La permanencia de las féminas que atienden a las gallinas también
fue determinante en los avances referidos, pues la puntualidad de la
misma persona en cada nave evita el estrés de las plumíferas.
Esa entidad avícola es la más destacada del país en el
perfeccionamiento empresarial en su sector y una de las mejores en los
portadores energéticos.