La actriz y directora cubana Bárbara Maldonado está realizando una
extensa y hermosa labor en Murcia. Ha dirigido talleres, construido
bellos muñecos y, sobre todo, ha logrado estrenar varios espectáculos
en los que continúa su fidelidad a temas como la protección de la
naturaleza, el cultivo de valores humanos y una recreación de la
ternura sin caer en el paternalismo. Bárbara continúa sus búsquedas
que el espectador cubano conoció durante sus años de labor en La Casa
de la Comedia. Los niños de La Habana Vieja y, sobre todo los que
frecuentaban el Centro de Cultura Comunitaria, pudieron disfrutar de
una propuesta singular en nuestro contexto, que llamaba la atención
acerca de la necesidad de conservar el medio ambiente y proteger el
entorno.
En la Biblioteca Regional de la autonomía española pude apreciar el
más reciente estreno de Ecoteatro Planeta Cansado: El sueño de
Achús, un espectáculo dinámico, agradable e inteligente. La
dramaturgia, sencilla pero eficaz, hilvana simpáticas situaciones
otorgando un peso significativo al universo musical. Rondas y
canciones de nuestra trovadora Liuba María Hevia alcanzan sentido
dramático y contribuyen a crear un clima de gracia, desenfado. La obra
cuenta de una forma ingeniosa las peripecias de Achús, una niña que
transita de un sueño a otro para adentrarse en circunstancias
insólitas. El trabajo de luces y efectos especiales se erige como uno
de los elementos fundamentales del montaje, gracias a la sabia
combinación de los colores y la ascendente estructura sonora, todo a
cargo de Guillermo Gálvez Maldonado. Los muñecos, concebidos por la
propia Baby y la importante colaboración en el atrezzo de José Luis
Vélez Leal, consiguen la participación, desatan lo humorístico y lo
reflexivo, además de resultar atractivos desde el punto de vista
visual.
En el plano interpretativo, tanto Francisco Ortuño como Olga López,
dan pruebas de una notable vitalidad que va de la certera manipulación
de diferentes tipos de marionetas a un correcto desempeño como actores
en vivo. Olga despliega una peculiar simpatía asumiendo voces diversas
y contrastantes. Francisco contribuye de manera decisiva al ritmo del
espectáculo, aunque es de esperar que a lo largo de la temporada logre
diferenciar más las diversas situaciones por las que transcurren sus
varios personajes. Ambos artistas muestran un excelente entrenamiento
y abundante sensibilidad.
Ecoteatro Planeta Cansado se ha convertido en Murcia en una prueba
del talento que emana de la cultura cubana. Sus montajes se han podido
apreciar también en el Teatro Bernal.