Nuevas adhesiones al Llamamiento A la conciencia del mundo

La dignidad no se puede silenciar

Pedro de la Hoz

Ante las calumnias y amenazas, voces amigas, en diversas partes del mundo, se levantan por Cuba. Llegan desde los más diversos puntos de la geografía y se hacen presentes mediante la firma del Llamamiento A la conciencia del mundo, que denuncia la intentona imperial de fabricar un pretexto para agredir a la Isla y reclama solidaridad con el pueblo cubano.

Howard Zinn, historiador 
y autor teatral norteamericano.

Suman 1 039 las firmas que se reflejan en el portal www.porcuba.cult.cu, habilitado para recibir las adhesiones al Llamamiento. Para hacer patente la suscripción del documento también se puede utilizar la dirección electrónica porcuba@cubarte.cult.cu.

Durante las últimas horas hicieron suyo el Llamamiento el intelectual franco-español Ignacio Ramonet; los reconocidos cineastas argentinos Eliseo Subiela y Fernando Birri; los cantautores Alejandro Filho, de México, y Víctor Víctor, de República Dominicana; y los panameños Pedro Rivera, cineasta y escritor, y Manuel Orestes Nieto, poeta, ganador del Premio Casa de las Américas, y la poetisa nicaragüense Gioconda Belli.

Desde los Estados Unidos se pronunciaron el escritor y editor Geoffrey Fox, quien acaba de publicar una serie de artículos sobre la defensa de los derechos humanos en Cuba, y el destacado historiador y dramaturgo Howard Zinn, autor de la pieza Marx in Soho.

Otras adhesiones provienen de la India, por parte del intelectual Prabir Purkayashta; de Sudáfrica, donde rubricó el documento Dennis Brutus, uno de los poetas mayores de ese país; y de Japón, suscrito por el latinoamericanista Hiroji Okabe.

Dennis Brutus figura entre las
 grandes voces líricas de Sudáfrica.

Mientras, en Madrid el Teatro Popular La Barraca, de manera colectiva, se adhirió al Llamamiento mediante un mensaje en el que antes afirman que "lo que Cuba ha conseguido al cabo de 44 años de agresiones terroristas, operaciones encubiertas, guerra sucia, de virus, plagas, intentos de asesinato, bloqueo organizado por Estados Unidos de Norteamérica, propaganda y desinformación, es un testimonio de resistencia incuestionable, de trabajo y de dignidad que no se puede silenciar".

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