ASUNCIÓN, 3 de mayo.—El clamor por
poner fin al gobierno del presidente de Paraguay, Luís González
Macchi, se reactivó hoy en círculos no solo de la oposición
política, sino también dentro del oficialista Partido Colorado
(PC).
Diversos medios de la prensa local,
bien recogiendo ese sentir o haciéndose eco de él, reclamaron a
Nicanor Duarte, también del PC y elegido en los comicios del 27 de
abril, la asunción anticipada de su mandato, informa Prensa Latina.
Entre otros, el presidente del
Congreso, el igualmente colorado Juan Carlos Galaverna, sostuvo que
cada momento de González Macchi en el Ejecutivo es un riesgo para
el país por "su demostrada ineficacia".
Criterios similares, que reiteran el
concepto generalizado de que el actual mandatario ha sido
negligente, coinciden en convocar a una transferencia acelerada del
poder y no el 15 de agosto, como determina la Constitución.
Tales reclamos han tomado fuerza
durante los últimos días, a tenor con los anuncios oficiales de
que el próximo lunes comenzarán los primeros contactos entre el
Jefe de Estado y Duarte, con vistas a los preparativos del traspaso
presidencial.
Para los adversarios, en general,
González Macchi ha sido incapaz de conducir una administración
coherente y es responsable de la aguda crisis política, económica
y social del pequeño país sudamericano.
En particular, dentro de las filas
coloradas su gestión ha sido funesta para el prestigio del PC, en
el poder desde 1947 a través de llamadas democracias de derecha y
regímenes dictatoriales.
Duarte dará continuidad a la larga
trayectoria gubernamental del PC, tras ganar las elecciones del
domingo pasado con alrededor del 37% de las boletas de algo más de
la mitad de los dos millones 500 000 votantes empadronados que
asistieron a las urnas.