
«A mí me gustaría que el pueblo cubano pudiera ver el documental. Es mi modesto homenaje al cantinero Constante Ribalaigua (Lloret de Mar, Girona, 1888-La Habana,1952), que emigró a Cuba a finales del siglo XIX, y alcanzó fama mundial como propietario del Floridita, donde Hemingway lo bautizó como El rey del daiquirí. «Aquí encontró otra patria y creó una familia», dijo a Granma el periodista, escritor y documentalista Ramón Vilaró Giralt, en el estreno de su documental Constante y el Floridita de Hemingway, en la Embajada de España.
En la presentación estuvieron el periodista y escritor Ciro Bianchi; el escultor José Villa Soberón, autor de la escultura del autor de El Viejo y el Mar, ubicada en el famoso bar; y el presidente de la Asociación de Cantineros de Cuba, José Rafa Malén, quienes aportaron sus testimonios en el audiovisual, que cuenta ya con más de un reconocimiento en festivales de España, Berlín y Singapur.
Constante y el Floridita de Hemingway, con guion y dirección de Ramón Vilaró Giralt, cuenta con la participación especial del actor, director de cine y artista visual Jorge Perugorría. El material «no solo se centra en la figura de Constante, exitoso bartender, reinventor del daiquirí, sino que hace una crónica sociológica de los años previos a la Revolución de Fidel Castro. Nos sitúa en aquellos años convulsos en Cuba, al apoyarse en fotos y grabaciones periodísticas de la época. Con estos elementos, además de la música más popular del momento en la Isla, recrea su entorno cultural y social», expresó Vilaró.
Según la crítica aparecida en el medio cinemagavia.es, la obra «es un ameno, interesante y recomendable documental, ágil y ligero en su metraje, con buena fotografía, que nos hace viajar por varios ambientes. Desde el territorio personal de Constante, el considerado padre de la cantina, hasta la dilatada estancia del aventurero Hemingway en su territorio favorito en La Habana».
Vilaró Giralt llegó desde Lloret de Mar (Girona), por primera vez a Cuba, en 1997, después de haber terminado su novela Tabaco, el imperio de los marqueses de Comillas, la cual se publicó en 2003. Hoy, está cada vez más convencido de que aquí encontró, junto con «las tres patas de Cuba: el ron, el tabaco y la música», un pueblo que recibió y sigue recibiendo a quienes lo visitan como si fueran sus propios hijos.












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Michael Vazquez dijo:
1
25 de octubre de 2022
18:05:02
Michael Vazquez dijo:
2
9 de noviembre de 2022
06:58:29
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