Carlos Esteban Embale Molina (La Habana, 3 de agosto de 1923-La Habana, 12 de marzo de 1997), fue durante muchos años la voz líder del Septeto Nacional Ignacio Piñeiro, agrupación de la que, incluso, llegó a ser su director. El pasado año se cumplieron 20 años de la muerte de este gran sonero y 95 de su natalicio. Ambas fechas pasaron sin penas ni glorias en nuestro país.
Los integrantes del Septeto Nacional acaban de presentar el disco Para siempre Embale, una producción que –bajo el sello Egrem– estuvo nominada en la categoría de Tradición Sonera y Campesina en Cubadisco 2019, y que han presentado a la próxima edición 20, de los Premios Latin Grammy, cuyos Nominados se darán a conocer el próximo 24 de septiembre.

Sobre este importante volumen que rinde tributo a Carlos Embale, prácticamente olvidado en el panorama musical cubano, conversó con Granma, Frank Oropesa Fernández, productor, compositor, músico y actual director del Ignacio Piñeiro.
«Pienso que hace rato Embale se merecía un homenaje así. Tanto para Dagoberto Sacerio Oliva, nuestro guitarrista, a cargo de los arreglos de la agrupación como para mí, fue un reto este disco. Embale fue un gran sonero y rumbero. Su voz fue un sello en el septeto. El disco debió salir el año pasado. Pero no importa, lo importante es que ya salió y que en el próximo mes de julio vamos a hacer un gran concierto en el teatro América, al que vamos a invitar a todos los artistas y agrupaciones que nos acompañaron en este empeño».
¿Podrías darnos algunos datos de Embale para que los lectores sepan de quién estamos hablando?, le pregunté a Oropesa, quien con Dagoberto tuvo a su cargo la producción artística del Cd.
«Te puedo decir que era un cantante excepcional. Si alguien hizo los temas de Piñeiro con verdadera cubanía ese fue Carlos Embale. Él inmortalizó temas como Cuatro palomas, Castigador, Lejana campiña, Mayeya o No juegues con los santos. Fue vocalista del Sexteto Boloña y la Orquesta Melodías del 40, que acompañaba al pintoresco Trespatines. Formó parte del Conjunto Matamoros, de Miguel Matamoros, y en los años 70 entró al legendario Septeto Nacional de Ignacio Piñeiro. Colaboró con Benny Moré, Compay Segundo y con el conjunto de rumbas de Alberto Zayas, «El melodioso». Se destacó por sus interpretaciones de música sacra de raíces negras (yoruba y abakuá) y por su capacidad única para la interpretación de la rumba, el bolero, el son y la guaracha.
«En el disco, continúo explicándome Oropesa, aparecen temas que Embale interpretó con el septeto y otros que escribimos especialmente para esta entrega. Míos son el que le da título al fonograma y Guaguancó a La California. De Dagoberto son: Eternamente inmortal y Por siempre tu cantar. De Piñeiro, por ejemplo, está Nadie sabe cómo vive ( Sambalé). Aparecen además Consuélate como yo, de Gonzalo Asencia «Tio Tom»; Dulce Habanera y La vida es una semana, de Rafael Ortíz Rodríguez o Diosa Africana, de Armando Valdés, entre otros.
«Invitamos a cantantes como Sixto Llorente «El Indio», Mandy Cantero, de Los Van Van, Ernesto Gatell «El Gato», William Borrego y Yulaysi Miranda, la ganadora de Sonando en Cuba; a músicos como el pianista Orlando Pérez «Landi» y a los Muñequitos de Matanzas, al Conjunto Sierra Maestra, a Rumberos de Cuba, a Timbalaye, y reunimos a un grupo de viejos rumberos e hicimos con ellos el grupo Rumberos de Antaño, para entre todos , y otros más, hacer este homenaje, que pienso que muchos nos van a agradecer y que otros músicos que le dieron mucha gloria a este país y que hoy también están olvidados, igual se lo merecen».
Frank Oropesa Fernández, con 25 años de permanencia en el Septeto Nacional Ignacio Piñeiro, lleva a cabo en la actualidad un intenso trabajo no solo como director, sino como compositor, labor que inició en 1995 con temas de rumba inspirados por Piñeiro y Horacio de la Lastra Padrón, autor de Pongan Atención, que cantaba Benny Moré. Esta faceta de Oropesa pronto verá la luz bajo el sello Bis Music, a través de un disco de autor que se llamará Rumbeando con los Soneros, el cual recogerá su labor autoral durante todos estos años.
En esta entrega aparecerán obras como Que te consuele el diablo (Salsa) que le grabó el Conjunto Casino; Viva la Rumba y el Son (Rumba-Son) en el estilo de Rumberos de Cuba y el trompetista Julito Padrón; Se quedó la Religión (Abakua), que hace Yoruba Andabo y muchos más, sobre todo, aquellos que ha compuesto para el septeto. «Estoy muy entusiasmado con este proyecto el cual espero que pronto esté en el mercado», me dijo Oropesa mientras dejaba escapar una sonrisa.
Pero no se puede destacar la fecunda actividad de este bongosero mayor, sin dejar de mencionar su labor como productor, la cual afirma, lo ha atrapado de forma vertiginosa en los últimos tiempos, sin poner en peligro para nada su trabajo autoral, de dirección y músico en el Septeto.
«Como productor he participado antes en varios proyectos importantes. Son ellos: los Cds Asunto familiar, del Sello Real Ritmo de Suiza, dedicado a los soneros Félix Baloy, Williams Baloy y Félix Baloy junior; Se partió el bate, del Sello Egrem, del Grupo Timbalaye, Premio Cubadisco; La Habana tiene su sony El más grande y universal, ambos del Septeto Nacional y el DVD El final no llegará, igual del Septeto, los tres últimos, con el sello Bis Music.
«En estos momentos estoy trabajando en un disco homenaje del Septeto nacional Ignacio Piñeiro al Gran Combo de Puerto Rico. En este contaremos con la participación de Gilberto Santa Rosa, Andy Montañez, Enrique Culebra Iriarte, y otros cantantes de esta importante agrupación de este hermano país. Hace años que ellos están tratando de presentarse en la Isla. Bueno, parece que este va a ser el momento para que se dé esa oportunidad. Pero tendrás que esperar más adelante para tener nuevas informaciones. Te lo prometo».










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Rafael Saumell dijo:
1
16 de julio de 2019
22:10:43
María Elena dijo:
2
17 de julio de 2019
09:32:17
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