Se hizo camino al danzar

Como estelas de emociones vividas en la escena y más allá de sus fronteras, quedaron grabadas las memorias del 26to. Festival Internacional de Ballet de La Habana, que ayer cerró sus cortinas con la gala de clausura desde la sala García Lorca del gth Alicia Alonso. Y se puso otra vez en evidencia la fuerza de este encuentro, y en particular de la danza, que sembraron en esta tierra, hace siete décadas, sus fundadores: Alicia, Fernando y Alberto.
Marcando esta edición, los aniversarios 70 del Ballet Nacional de Cuba (BNC), y el 75 de nuestra Alicia-Giselle, no pudo tener mejor eco en teatros e instituciones ese lenguaje universal, en el que el pueblo volvió a ser protagonista, algo insólito en otras latitudes, donde este arte deviene casi exclusivo de las clases dominantes.
 Magia transformada en realidad vivida motivó cada función en las cinco salas de cuatro teatros, que resultaron pequeñas para albergar tanto amor y entrega por el arte danzario, y nuestra Cultura Nacional.
Compañías de Suiza, Dinamarca, España, República Checa, Estados Unidos, bailarines representantes de importantes agrupaciones de casi todos los continentes, se unieron en las tablas con los anfitriones del BNC, en estos días signados por el movimiento. Noveles y consagradas figuras que siguen el camino de sus antecesores, poniendo en mayúsculas el nombre de Cuba.
La Escuela Cubana de Ballet marca un estilo singular, con tintes caribeños y nuestros, en el ballet clásico, y da frutos sin cesar, desde aquellas primeras generaciones, hoy legiones de danzantes, que cual savia nutricia heredaron las llamadas cuatro joyas del ballet cubano (Loipa Araújo, Aurora Bosch, Josefina Méndez y Mirta Plá), quienes iluminaron nuestra es­cena.
La sala García Lorca del gth Alicia Alonso, transformada en coliseo de emociones, volvió a vibrar en el ¡hasta pronto! al Festival, a sabiendas de que en cada obra que nazca en la escena, en el aliento de sus hijos, en la Escuela, en el propio Teatro, en el bnc… vibrará la Maestra, y todos aquellos que dieron vida a esta realidad. Junto a ella, se hace camino al danzar.