
Bamboleo, una de las orquestas preferidas de Cuba, está de cumpleaños, y a la vuelta del tiempo mantiene un lugar privilegiado dentro del gusto de los bailadores.
Para celebrar, la agrupación ofrecerá un gran concierto este 22 de febrero en La Tropical, donde tendrán entre sus invitados a grandes como César Pupy Pedroso, Manolito Simonet, Elito Revé, y Maykel Blanco, entre otros.
Creada y dirigida por el pianista, compositor y arreglista Lazarito Valdés, artífice de ese sonido y estética que irrumpió en la escena nacional en pleno boom de la salsa, la orquesta surgió en una época donde la gente asimilaba muy bien la música popular bailable.
“Muy rápido nos ganamos el apoyo de los bailadores, y creo que en eso también influyó que ofrecíamos algo diferente. Eso en gran medida nos ha traído al punto en que nos encontramos hoy”, comentó Valdés a Granma.
“Soy portador de una gran herencia musical como pianista por parte de mi padre, pero también de interesantes influencias, por ejemplo del jazz, desde mis años de estudiante en la Escuela Nacional de Arte. Siempre traté de llevar todo eso al trabajo de la orquesta para lograr un sonido que nos desmarcara de las demás agrupaciones. Todo resultó, el público recibió el sonido de Bamboleo de muy buena gana, por eso creo que nos identifican”.
—El jazz es parte importante del trabajo de la orquesta…
—Siempre hemos trabajado esta línea en paralelo con la música popular. Los músicos cubanos están muy bien preparados para abordar este género. En mi caso he aprovechado bien esta oportunidad, estudio a conciencia el piano y cada vez que tengo una oportunidad de jazzear lo hago con muchísimo gusto.
Bamboleo trabaja con mucha disciplina, tratando de evolucionar en todos los sentidos, pero siempre con el bailador en la mira.
—¿Cómo valora a la orquesta tras 20 años?
—Hemos creado una línea, que nos identifica, y en eso tiene mucho que ver la visualidad si bien marcamos época con las cantantes femeninas, no solo por sus excepcionales voces, también los hicimos por la visualidad. De aquella etapa quedó el peinado a lo bamboleo como lo hacían Haila y Vania.
“En cuanto a nuestro trabajo, hacemos timba, aunque no somos ajenos a lo que sucede en el mundo. Bamboleo está muy atento a lo que en materia musical sucede en el momento”.
—¿En qué condiciones ve la música popular bailable hoy?
—La buena música cubana nunca va dejar su espacio. Las orquestas son el corazón de esta manifestación artística, pero sucede que los grandes espacios no se están aprovechando como deben. El trabajo de las agrupaciones está circunscrito casi exclusivamente a las Casas de la Música, donde la entrada no es asequible para grandes cantidades de público. Pero creo que lo más contraproducente es la existencia de espacios donde se pone muy poca música cubana. No quiero ir contra las modas, pero el gusto del público se educa, y si no escuchan música cubana claro que no les puede gustar. Es una responsabilidad de todos que eso cambie, que nuestra música recupere esos planos estelares que disfrutó en tiempos pasados.
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MARCOS dijo:
1
12 de febrero de 2015
07:04:18
Richard dijo:
2
12 de febrero de 2015
09:47:40
Laura dijo:
3
14 de febrero de 2015
03:49:17
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