La inminente agresión armada del Gobierno de Estados Unidos a Cuba y ante una guerra termonuclear en los días llenos de peligros y principios, conocidos como la Crisis de Octubre, el pueblo de Cuba se puso, la tarde del 22 de octubre de 1962, en alarma de combate al llamado del Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias, la Defensa Popular y las Milicias Nacionales Revolucionarias se movilizaron. Los pioneros permanecieron estudiando; los mayores recogían café, organizados en la Unión de Estudiantes Secundarios (UES); los obreros indispensables en su puesto de producción; las mujeres sustituyeron en la producción y los servicios a los que ocuparon las trincheras; la tierra continuó produciendo, la Revolución permanecía avanzando y la vida cultural iba en ascenso. Incluso los extranjeros radicados y de visita en el país crearon su Brigada Internacional de Combate, dispuestos a defender a Cuba.
El 24 de octubre, a dos días de haberse declarado la alarma de combate, la dirección de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), en reunión extraordinaria, acordó dejar constituido un organismo interno de trabajo diario que con el nombre de Taller de la Uneac, tendría a su cargo poner de inmediato el trabajo de los escritores y artistas de Cuba al servicio de la Patria amenazada.
Esa misma noche comenzó a laborar el taller que habría de producir carteles de propaganda, textos de artículos, poemas, canciones y otras creaciones de utilidad inmediata para el momento de emergencia y patriotismo que vivía el país. Como muestra del primer día de trabajo se publicaron los poemas de Nicolás Guillén, Roberto Fernández Retamar y Pablo Armando Fernández, que además eternizan la actitud que mantuvo el pueblo en esos históricos y peligrosos días:
Cuba amenazada (Canción)
Ahora te quiero más, mi Cuba,
Ahora te quiero más, mi patria,
Porque por perros y por lobos
Y por buitres estás rodeada.
Ahora te quiero más, mi isla,
Ahora te quiero más, mi amor:
Porque ahora voy a defenderte
Con la bala y el corazón.
Roberto Fernández Retamar
25 de octubre de 1962
Son
Kennedy con su bloqueo
nos quiere cerrar el mar.
Quenedí, quenedá,
afeitar a los barbudos,
volvernos a esclavizar,
Quenedí, quenedá,
¡qué bruto que es el Tío Sam!
Quenedá.
Ni un paso atrás, compañeros,
Amigos, ni un paso atrás,
Quenedí, quenedá,
Plomo y plomo al enemigo,
Plomo y plomo y nada más.
Quenedí, quenedá
¡Que bruto que es el Tío Sam!
Quenedá.
Martí quiso a Cuba libre
Y Fidel dijo: ¡Ya está!
Quenedí, quenedá.
Con bloqueo o sin bloqueo
Libre por siempre será.
Quenedí, quenedá,
¡qué bruto que es el Tío Sam!
Quenedá.
¡Lárgate, yanqui de aquí!
Quenedí.
¡Déjanos, Kennedy, en paz!
Quenedá.
Porque si no, vas a ver,
vas a ver,
El plomo que lloverá.
Ay, vas a ver
El plomo que lloverá.
Quenedá.
Nicolás Guillén
Canción
Compañeros,
cantemos con las armas,
la vida es para el canto
para el amor.
La casa familiar
defenderemos.
Los ojos del amor:
madre,
mujer,
hermanos
defenderemos
con las armas amor,
con la verdad amor,
con el amor amor
defenderemos,
compañeros,
el canto de las armas.
Pablo Armando Fernández
Octubre 25 de 1962
En otra ocasión, el poeta nacional,
Nicolás Guillén escribió:
Letrilla cubana
Que aquí venga un tal por cual
y sin miramiento alguno
nos registre el importuno
desde el traspatio al portal,
está mal.
Mas poner valla o contén
al que llegando de fuera
sin más ni más tener quiera
por el mango la sartén,
está bien.
Que el enemigo brutal
su ataque injusto no cese
y aún pretenda que lo bese
si vuelve mi azúcar sal,
está mal.
Que los cubanos estén
unidos y en pie de guerra,
y por defender su tierra
la sangre y la vida den,
está bien.
Que el estúpido animal
que hoy preside a Norteamérica
aliente en su furia histérica
un incendio universal,
está mal.
Mas que cortando a cercén
la cabeza al yanqui fuerte,
exclamemos: ¡Patria o Muerte!
una y diez veces y cien,
está bien.
29 de octubre
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Francisco Rivero dijo:
1
26 de octubre de 2017
01:41:26
Juana Pochet Pochet dijo:
2
26 de octubre de 2017
09:15:11
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